Momentos de dramatismo se vivieron ayer en la zona de San Luis y Río de Janeiro, cuando -por motivos que se investigan- un kiosco de diarios y revistas se prendió fuego y alcanzó un medidor de gas. Personal de Litoral Gas tuvo que intervenir, y se trabajó casi tres horas para interrumpir el servicio y apagar las llamas. El hecho provocó que familiares de las víctimas de calle Salta 2141 criticaran el accionar de la distribuidora. En tanto, desde Litoral Gas garantizaron que la fuga estuvo controlada desde que llegó el personal de la empresa. Se esperan pericias para determinar qué sucedió.

El incendio se desató alrededor de las 6 de ayer. Las llamas se propagaron y llegaron a un medidor de Litoral Gas. La situación causó preocupación entre los vecinos por el alto riesgo que generaba la situación, en la ciudad donde explotó un edificio, en 2013. "Vinieron los de Litoral Gas y fueron a buscar las herramientas", contaron vecinos a los móviles de prensa apostados en el lugar.

El titular de Defensa Civil de la Municipalidad, Gonzalo Ratner, señaló en medios radiales que "no es fácil interrumpir el suministro cuando el escape se da en una ochava, pero finalmente se logró". Personal de Litoral Gas, con la asistencia de Bomberos Zapadores, trabajó durante casi tres horas para ello. Parte de las tareas que llevaron adelante consistió en hacer pozos en la vereda.

En tanto, el encargado de los Bomberos Zapadores, Miguel Benítez, planteó que "el escape se dio en la red de gas domiciliaria. La gente de la empresa ya encontró la llave para cortar el suministro. La situación está bajo control", dijo.

Cristian López, dueño del puesto de diarios incendiado dijo a LT8 que le "avisaron a las seis de la mañana que se había prendido fuego el kiosco". Y agregó: "Las revistas se prendieron fuego rápidamente. Atrás hay una garita de gas que como tenía una pérdida hizo como una explosión. Había pérdidas, pero se ve que no le dieron importancia. La garita suministra a la casa que está en la planta alta. Ya una vez vino la gente de Litoral Gas y me tiraron abajo el puesto porque no sé qué querían hacer con eso. A la garita la dejaron y se ve que el problema no lo arreglaron", dijo. En otros medios, lamentó: "No me quedó nada después de 12 años de trabajo".

 

Más tarde, el gerente de Relaciones Institucionales de Litoral Gas, José María González, indicó que desde que llegó la cuadrilla de la empresa la situación "estuvo controlada" y la demora se dio "en la obturación" del caño. Además, consideró que primero hubo un incendio y luego se produjo una fuga de gas en el lugar, como consecuencia. "Hay partes que sometidas al calor pueden presentar fugas. Un gabinete, por solo tener una fuga, no se prende fuego. Suponemos que el incendio en el quiosco es lo que provoca la fuga y que se enciendan las llamas", dijo sobre lo que deberán determinar las pericias. Y quiso aclarar: "Sabíamos perfectamente por dónde iba la cañería y lo que teníamos que hacer. No es que no teníamos los planos o nos faltaba la herramienta adecuada".