Comenzó su militancia a principios de este año. “Mi nombre es Leah Namugerwa. Tengo 14 años. Soy activista climática. Demando al gobierno del presidente Kaguta Museveni que prohíba las bolsas de plástico”, escribió en las redes . Hoy tiene 15 y celebró su último cumpleaños con una convocatoria para plantar 200 árboles. Namugerwa se sumó al movimiento lanzado por Thunberg y llevó a Uganda los Viernes por el Futuro, sobre el que había escuchado hablar en 2018 pero sin entender la idea de huelga asociada al reclamo climático. “Le pregunté a mi papá qué significaba y me explicó que Greta no iba a clases cada viernes para protestar contra la inacción gubernamental. Le pregunté sieso era posible en Uganda y él me dijo que sí”, recordó en diálogo con un medio ugandés.

Tiempo después, hizo su primera protesta frente al parlamento, una actividad que “parecía rara a mucha gente, incluida mi familia”. Luego se sumaron compañeros de colegio y también desconocidos. “Mientras muchos niños y niñas no toman en serio mi mensaje sobre el clima, algunos adultos me critican. Pero el apoyo de niños y niñas supera las críticas de los adultos. Somos más del 70 por ciento de la población de Uganda y no podemos dejar que la minoría arruine nuestro futuro”, advirtió.