“Hoy sabemos cuál es la realidad. Este punto de partida es sobre el cual acepto ser evaluado como presidente: por si pudimos reducir la pobreza en este gobierno”, aseguró el presidente Mauricio Macri el 28 de septiembre de 2016. “Hay una cantidad enorme de argentinos que no la está pasando bien, les decimos que estamos trabajando todos los días para ir a pobreza cero”, agregó el mandatario. Ese día el mandatario brindó una conferencia de prensa junto a la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, luego de que el Indec informara que la pobreza en el segundo trimestre de ese año llegaba al 32,2 por ciento.


La decisión de fijar ese punto de partida generó polémica porque el gobierno tomó como herencia el 32,2 por ciento, pese a que en diciembre de 2015 había promovido una fuerte devaluación del peso con el consiguiente impacto social. No obstante, en aquella ocasión los datos no estuvieron disponibles porque el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner había dejado de publicar los datos en 2014. Así y todo, la base que tomó Macri, con impacto de la devaluación incluida, no pudo ser mejorada en sus tres años y medio de gestión.

“En unas horas, el Indec va a dar a conocer el último índice de pobreza que, lamentablemente, va a reflejar la difícil situación por la que atravesamos”, aseguró este lunes el presidente horas antes de que se conociera que la pobreza había trepado a 35,4 por ciento en el primer semestre del año. “Hay que terminar con la pobreza en un país como el nuestro con tantos problemas estructurales por resolver, y eso requiere consensos, ningún gobierno lo va a lograr por sí solo”, declaró Macri en una pyme en Morón. “Voy a seguir trabajando para que las familias puedan salir adelante”, agregó. “Sé el esfuerzo que hicieron y se los agradezco”, insistió el Presidente y luego partió a Junín donde encabezó un acto de campaña bajo el slogan “sí se puede”.