De acuerdo a legislaciones vigentes expongo ante la Honorable Cámara de Archiduques mi Plan Alimentario Nacional, mal llamado Pan, propuesto para cuando sea Rey Electo.

A continuación, el menú básico para la manutención del ciudadano tipo a razón de cuatro ingestas diarias.

Rolls de vieja del agua con aliño de viruta.

Ceviche de cuis.

Goulash de comadreja con salsa de fluoxetina.

Buñuelos de corticoides.

Ravioles de puloil y coliflor.

Fettuccine al huevo con escroto a la romana.

Bife de ojo con zapallo a la cal.

Criadilla de centauro sobre colchón verde.

Filete al romerillo apanado en la propia sarna del novillo.

Cochinillo a la morfina.

Morcilla de meloma a la Monsanto.

Butifarra al uso nostro.

Soufflé de estupro con vino de misa.

Herpes de Afrodita marinado en retroviral.

Cordero de dios a la sal rosa.

Panaché de hostias con crujiente de soya.

Budín de clonazepam.

Fondue de menstruos.

Dulce de heces sobre isla flotante.

Barbitúricos azafranados con jarabe antitusivo,

Natilla de nodriza radioactiva.

Mousse de brea.

Difteria braseada a la vainilla.

Frutos de estación almibarados por el habla de los loros.

¡Buen Provecho!

¡Salud!

pd

Primero. Ninguna canción tercera en el lado cuatro del disco dos tiene que ver con esto. No sé por qué lo preguntan si todos conocemos Ob-la-di, ob-la-da.

Segundo. Avalan mi dieta miles de profesionales que no cabrían en setenta hojas impresas de ambos lados en un cuerpo de letra muy pequeño, por lo cual prefiero agradecer a todos sin nombrar a nadie.

Chau. Tengo turno con la odontóloga.

drhoms@gmail.com