Desde Mar del Plata

“Estamos en una situación muy compleja, tanto económica, como política y social, que nos va a obligar a todos a sentarnos”, aseguró Marcos Galperín, fundador de Mercado Libre, la empresa argentina con mayor valor bursátil del país. Su mirada fue compartida por empresarios, CEOS y ejecutivos que asistieron al Coloquio de IDEA de Mar del Plata. Esto se vio reflejado en la encuesta de expectativas entre ejecutivos que difunde todos los años la consultora D´Alessio Irol: todos los sectores pierden contra la inflación y el 82 por ciento consideró que este semestre está peor de lo que preveía.

Galperín fue el CEO más esperado del encuentro. Participó del primer panel del jueves a la mañana en el Hotel Sheraton. “Tenemos problemas realmente graves, somos los únicos que no los solucionamos, porque nuestros vecinos sí lo hicieron”. Además, celebró la reglamentación de la Ley del Conocimiento: “Se aprobó en el gobierno de Néstor Kirchner, venció y fue renovada en el de Cristina Kirchner, y este año se reglamentó con Mauricio Macri”. Además, en línea con el video que difundió Mercado Libre esta semana, que busca saltar la grieta con los mensajes de Luis Brandoni y Florencia Peña, aseguró: “Hay que tomar riesgos e invertir independientemente de la coyuntura”.

También se refirió a la actual crisis Federico Procaccini, CEO del banco virtual de Santander, quien preside el Coloquio de IDEA de este año. “Es triste esta crisis económica de volver a empezar de nuevo, tenemos que empezar a decir basta porque ya no tenemos más chances”. En la misma línea se refirió Marcos Gradín, director financiero de Loma Negra. Ante las preguntas que siempre se hacen los ejecutivos, del estilo de “¿Cómo viene la empresa?” o “¿Cómo la ves?”, las respuestas son todas expresiones de desánimo, que contrastan con los ánimos de años anteriores. “El año pasado la economía caía, pero ahora otra vez, y nos agarra más desarmados”, contó a este diario. Además, criticó las elecciones PASO por haber sido tan determinantes, pero a la vez no haber definido nada: “Que vengan las elecciones, por favor, no importa quien gane”, manifestó. Tras el cierre de la cementera en Sierras Bayas, dijo que invertirán en una nueva planta, pero en Olavarría.

Por su parte, el gremialista Antonio Caló (UOM) aseguró que en las charlas que tuvo con los empresarios metalúrgicos se mostraron enojados con el Gobierno: “Los empresarios que en los últimos años aplaudieron a Macri ahora lo insultan. Dicen que los arruinó, y no sólo a las pymes, sino las compañías más grandes. Es muy fácil de entender sus planteos: los empresarios quieren ganar plata y en estos años perdieron”.

Las sensaciones de los empresarios sobre la crisis económica fueron expuestas, como cada año, por la encuesta de “Expectativas de Ejecutivos”, que realiza la consultora D´Alessio Irol. El 82 por ciento de los encuestados consideró que este semestre fue peor de lo previsto. Dijeron que las razones se deben a los errores en el plan económico, la inflación, la caída de la actividad, la devaluación pos Paso y la incertidumbre política. “La industria es el epicentro del pesimismo, mucho más que los servicios, porque sin divisas no pueden operar”, explicó el economista Luis Secco, quien también participó de la presentación. Sin embargo, confían en una tendencia hacia la mejora para el próximo período.

La percepción de la situación económica actual es la peor desde 2002. Siendo 100 el mejor resultado y 0 el peor, la votación fue de 19 para el semestre de mayo a octubre. En el 2018 había sido 23 y en el 2002, solamente 3. El indicador actual está por debajo de la expectativa, ya que hace 6 meses el índice era 70. Para el próximo semestre es de 47. Sobre las causas de la crisis, el 70 por ciento la atribuyó al déficit fiscal.

La lluvia de inversiones nunca llegó y actualmente las inversiones cayeron al nivel del segundo semestre de 2014. “Argentina invierte sólo el 12 por ciento del PBI, no existe una cifra más baja en la historia reciente”, explicó Secco. En cuanto al empleo, un tercio de las compañías no harán modificaciones, mientras que casi el 40 por ciento lo disminuirá. Sólo el 19 por ciento lo aumentará. También son negativas las perspectivas de rentabilidad: sólo el 14 por ciento de las empresas esperan que aumente. Sobre la suba de precios, la encuesta mostró que todos los sectores perdieron en precios contra la inflación. De cara a diciembre, el 54 por ciento consideró que continuará alargándose la cadena de pagos y el 53 por ciento que aumentará el dólar.

Con respecto al año que viene, los encuestados consideraron que el principal factor para aumentar la competitividad del país es bajar la inflación. Sólo el 10 por ciento dijo que influirá la construcción de consensos. “Acá se habló mucho de mesas de diálogo, pero los 240 que votaron parece que se olvidaron de los consensos a la hora de votar”, afirmó D´Alessio. Sobre las expectativas para el futuro Gobierno, el 61 por ciento de los votantes considera que van a aumentar los impuestos y el 62 por ciento que aumentará la presión sindical. Además, el 58 por ciento consideró que bajará la tasa de interñes. “La encuesta no pregunta quién cree que va a ganar las elecciones”, aclaró D´Alessio. La medida más votada para promover la inversión en 2020 fue la eliminación de impuestos distorsivos y para mantener el empleo, pidieron por incentivos fiscales y cambios en condiciones de contratación.

Los resultados de este año, en el que la economía volverá a caer por segundo año consecutivo, contrasta con encuestas de años anteriores. En 2017, último año que creció la actividad económica, el 79 por ciento de los encuestados votó que el segundo semestre de ese año la situación sería mucho o moderadamente mejor.