La balanza comercial de septiembre arrojó un superávit de 1744 millones de dólares, lo cual implica una fuerte mejora en relación a los 337 millones del mismo mes del año pasado. Este resultado se explica tanto por una mejora de las exportaciones como por la caída de las importaciones producto de la recesión en la economía local. En nueve meses, el ingreso neto de dólares por la vía comercial asciende a 9497 millones de dólares, que contrastan con el déficit de 6432 millones anotado entre enero y septiembre de 2018. La evolución del acumulado del año responde casi exclusivamente al derrumbe de las importaciones producto de la crisis.

Las exportaciones de bienes ascendieron a los 5746 millones de dólares el mes pasado, un alza interanual del 14,1 por ciento que se produjo por una mejora del 22,3 por ciento en las cantidades, mientras que los precios de los productos exportados bajaron un 6,7 por ciento. Las exportaciones se incrementaron principalmente por las mayores ventas de porotos de soja, que permitieron un alza de ese rubro de 511 millones de dólares, y maíz (217 millones). En ambos casos, la mejora se debe al crecimiento de la cosecha de granos en relación al año pasado, cuando había quedado afectada por la sequía. También subieron las exportaciones de carne bovina (114 millones) y biodiésel (106 millones).

Por el lado de las importaciones, el monto total fue de 4002 millones en septiembre, una merma interanual del 14,9 por ciento. Jugaron en el mismo sentido la baja de las cantidades (-8,3 por ciento) y la de precios (-7,2). Las mayores caídas correspondieron a combustibles y aceites minerales (-188 millones de dólares), reactores nucleares, calderas, máquinas, aparatos y artefactos mecánicos y sus partes (-151 millones de dólares), vehículos y autopartes (-122 millones) y porotos de soja (-83 millones de dólares). En el desagregado según su uso, las importaciones de bienes de capital, vinculadas a la inversión productiva, cayeron un 18,6 por ciento en septiembre, mientras que los bienes intermedios, asociados al flujo productivo, lo hicieron en un 9,1 por ciento. Los bienes de consumo bajaron un 17,4 por ciento.

En el sector automotor, uno de los principales complejos del comercio exterior, el intercambio de septiembre arrojó un saldo positivo de 127 millones de dólares, resultado de la caída de las exportaciones en 38 millones y una baja de las importaciones del orden de los 122 millones de dólares. En tanto, el saldo en el complejo sojero arrojó un superávit de 701 millones.

El mes pasado, las exportaciones a China alcanzaron los 897 millones de dólares y las importaciones, 794 millones de dólares. En el caso de Brasil, las exportaciones sumaron 823 millones de dólares y las importaciones, 810 millones de dólares. En cambio, las ventas a Estados Unidos fueron de 342 millones y las importaciones, de 536 millones.