Un grupo de profesionales autodenominados Jóvenes Científicos Precarizados acompañará la apertura de sesiones ordinarias, el próximo miércoles 1 de marzo, con una Feria de Ciencias en las inmediaciones del Congreso de la Nación, durante la cual denunciarán que “al recorte del 20 por ciento de las becas doctorales y postdoctorales realizado en 2016, se le suma un ajuste de más del 50 por ciento en los ingresos a la carrera de investigador”.

 

Los científicos denunciarán, además, que las tres modalidades de convocatoria de ingreso a la carrera de investigador (general, repatriación y temas estratégicos) fueron unificadas en un solo llamado general, que no solo reducirá la cantidad de nuevos investigadores a 450, de los 830 contemplados en la convocatoria de 2015, sino que 70 de ellos provendrán del exterior si se mantiene el promedio de repatriación de los últimos años.

 

“El resultado –añaden los científicos- será un achicamiento de las vacantes de la convocatoria general (investigadores en ciencias sociales y ciencias básicas), que de 900 pasarán a un máximo de 225”, en sintonía con las declaraciones del ministro del área, Lino Barañao, quien hace poco recomendó que los científicos se fueran del país porque el sistema está "rebalsado".  

 

Los investigadores agregaron que “la actual convocatoria a proyectos de investigación (PIP) se está haciendo sin compromiso de financiamiento, algo inédito en el mundo”, que ya se tradujo en el intento de despedir a 500 científicos del CONICET a fines del año pasado, que finalmente fueron reincorporados, tras la toma del Ministerio de Ciencia y Técnica.

 

El plan de lucha de la comunidad científica se completará con un paro nacional el próximo miércoles y la organización de ferias en distintos ciudades del país. En la ciudad de Buenos Aires la protesta comenzará a las 10, con diferentes  exposiciones y actividades, a través de las cuales los científicos se proponen compartir sus investigaciones con toda la comunidad y ser escuchados por los diversos bloques legislativos, la mayoría de los cuales votó a favor del Presupuesto 2017, con contempla un severo recorte para el sector.