Hoy empiezan las audiencias en el Congreso de los Estados Unidos para tratar las acusaciones contra el presidente Donald Trump, que pueden llevar a un juicio político. El proceso arranca en la cámara de Diputados, que compila los cargos, interroga testigos, reune documentos y otras pruebas, y vota si presentar cargos. El final es en el Senado, que funciona como tribunal y vota si el presidente es culpable o no. Los demócratas, por instrucciones de su jefa de bloque Nancy Pelosi, se van a concentrar sólo en la cuestión ucraniana, en la que el presidente de Estados Unidos puso como condición para ayudar a este aliado que investigara al hijo del ex vicepresidente y ahora precandidato demócrata Joe Biden.

Un memo del partido republicano publicado ayer por el diario The New York Times indica que el partido de Trump va a defenderlo con toda energía. Los republicanos recibieron instrucciones de sus líderes parlamentario de seguir la estrategia de decir que el presidente no hizo nada malo, apenas pedirle a Ucrania que haga pública una investigación que ya existía. Según el memo, es necesario insistir en que los demócratas basan sus acusaciones sólo en lo que dice un grupo de burócratas y funcionarios del gobierno que son demócratas y exageran. Los republicanos que participen en los paneles de interrogatorio a testigos van a cuestionar sus intenciones y su capacidad.

"Los demócratas quieren juzgar al presidente Trump sólo porque un grupo de burócratas no electos y anónimos no estuvieron de acuerdo con la decisión del presidente y no les gustó que llamarar al presidente Volodimir Zelensky", dice el memo, que fue distribuído el lunes a la noche. "El presidente trabaja por el pueblo americano. Y el presidente Trump está haciendo lo que los americanos lo eligieron para que haga".

Las audiencias comienzan esta mañana en el Capitolio de Washington, con los discursos inaugurales de los congresistas participantes y con los primeros testimonios del caso. Los primeros en hablar frente al comité serán dos diplomáticos de alto rango que, piensan los demócratas, van a describir cómo Trump desplegó a colaboradores cercanos, incluyendo su abogado Rudolph Giuliani, para beneficiar sus intereses personales ante Ucrania.