Se fue por falta de códigos, podría decirse. Es que al entrenador del Invictasauro, de las divisiones juveniles del fútbol italiano, lo despidieron tras la victoria de su equipo por la friolera de 27-0, un abultado resultado que para los directivos del club demostró una "falta de respeto" para los oponentes, del Marina Calcio.

"Nos quedamos atónitos y profundamente arrepentidos al escuchar que nuestro equipo de juveniles había vencido a Marina Calcio por 27-0", dijo el presidente Paolo Brogelli en un comunicado. "Los valores del fútbol juvenil son la antítesis de tal cosa. El oponente siempre debe ser respetado y eso no sucedió", agregó el dirigente.

"Como presidente, me disculpo sinceramente con el club Marina. Anuncio que nuestros directores decidieron, por unanimidad, despedir al entrenador Massimiliano Riccini. Nuestros entrenadores tienen el deber de entrenar a jugadores jóvenes, pero sobre todo, de educarlos", sentenció Brogelli.

Un hecho semejante ocurrió en 2015, cuando el Serranos Sub 11 de España se impuso por 25-0 a Benicalap, desembocando en el despido del entrenador ganador, Pau Cercos.