La filial argentina de la alimenticia Mondelez, fabricante de los productos Milka, Oreo, Terrabusi, Mantecol, Express y Beldent, presentó la semana pasada formalmente un Proceso Preventivo de Crisis para avanzar con medidas temporales que le permitan suspender 500 trabajadores.

La propuesta de la empresa es suspender por seis meses a 350 trabajadores de la planta de Pacheco, donde se producen las marcas Oreo, Pepitos, Express, Variedad, galletitas Mayco, Tita, Rodhesia y alfajores Milka, Shot y Terrabusi, y 150 de la planta de Victoria, donde se hacen las marcas Halls, Beldent, chocolates Milka y los Palitos de la selva. En ambos establecimiento productivos se desempeñan en total más de 2.300 empleados. Como informó PáginaI12 el pasado 9 de noviembre , las suspensiones se concretarían a partir del primero de diciembre con el pago del 90 por ciento sobre el salario básico, sin incluir premios ni incentivos. 

“La coyuntura económica que atraviesa el país afecta de manera directa a la industria de la alimentación. En el último periodo se vienen registrando una caída en el consumo y desaceleración en nuestras ventas, con la consecuente acumulación de stock de productos y reducción de la producción. Mondelez está siguiendo de cerca la situación y mantiene un diálogo abierto con el Ministerio de Trabajo y con el Sindicato de Alimentación. En este contexto, se están evaluando medidas temporales en nuestras plantas para evitar medidas más extremas”, informó la empresa la semana pasada al justificar su pedido de suspensión. Lo que hizo ahora fue dar un paso más al tramitar formalmente el Preventivo de Crisis que le permitirá concretar las suspensiones.

Antes de la comunicación de despidos o suspensiones que afecten a más del 15 por ciento de los trabajadores en empresas de menos de 400 trabajadores; a más del 10 por ciento en empresas de entre 400 y 1.000 trabajadores; y a más del 5 por ciento en empresas de más de 1.000 trabajadores, corresponde tramitan el Preventivo de Crisis. En la presentación, la compañía advirtió que el esquema de suspensiones propuesto es de “sobrevivencia” a la espera de una reactivación económica que permita recomponer su situación sin tener que llegar a concretar despidos.

En los últimos meses han sido varias las alimenticias que registraron pérdidas por la suba de los costos y la caída en las ventas, entre ellas Arcor, Unilever y Alco Canale.