Desde Santa Fe

Omar Perotti recibió ayer un inesperado golpe político. A la mañana, los senadores del PJ se sentaron en primera fila en el acto de unidad del peronismo, y a la tarde rompieron el bloque y votaron sobre tablas el presupuesto 2020, cuando aún no habían transcurrido 24 horas desde que Miguel Lifschitz lo ingresara a la Cámara alta. No hay antecedentes de un hecho similar. "Todo es muy raro", dijo el senador Alcides Calvo, quien integra el equipo del gobernador electo al describir "una situación que nunca imaginé que iba a vivir". Se lo veía muy abrumado. Calvo se preguntó: "Por qué tanta celeridad" para el tratamiento expres, mientras en los corrillos parlamentarios circulaban versiones sobre el engorde de partidas para la Legislatura.

Después de horas de cabildeos, apenas el vicegobernador Carlos Fascendini abrió la sesión, el jefe del bloque del Frente Progresista Felipe Michilig propuso votar el presupuesto sobre tablas. La moción se aprobó por 13 a 6. Y ahí quedó expuesta la fractura de la bancada del PJ: seis senadores votaron a favor: Armando Traferri (que era el líder del espacio), Rubén Pirola (presidente provisional del Senado), Guillermo Cornaglia y los tres del norte: José Baucero, Joaquín Gramajo y Osvaldo Sosa. Los trece votos se lograron con los siete senadores del oficialismo: cinco radicales (Michlig, Rodrigo Borla, Orfilio Marcón, Lisandro Enrico, Germán Giacomino) y los dos socialistas: Miguel Angel Cappiello y Miguel González, precisamente los que perdieron sus bancas el 16 de junio y apenas tienen 19 días de mandato.

En los corrillos parlamentarios circulaban versiones sobre el engorde de partidas para la Legislatura santafesina.

 

De un lado, quedaron los seis del grupo Traferri que votaron el tratamiento sobre tablas. Y del otro, sus cinco colegas que se opusieron y ratificaron su apoyo a Perotti: Calvo, Ricardo Kaufman, Eduardo Rosconi, Cristina Berra y Danilo Capitani, quien el 11 de diciembre asumirá como ministro de Desarrollo Social. Más, el radical disidente Hugo Rasetto, que hace rato tiene un bloque personal. Seis peronistas con Traferri de un lado y cinco del otro, pero cuando asuman los electos Marcelo Lewandowski (Rosario) y Marcos Castelló (La Capital) serán: seis a seis. Lo llamativo es que a la mañana Traferri, Pirola, Cornaglia, Baucero, Gramajo y Sosa se habían sentado en primera fila en el acto de la unidad del peronismo.

Calvo no ocultó su desazón por la fractura. "Todo es muy raro", dijo al fundar su voto negativo. "El presupuesto ingresó hace menos de 24 horas". Varios senadores se quejaron porque ni siquiera pudieron leerlo y menos, consultar el desagregado que discrimina partidas y los engordes. "Me pregunto por qué tanta celeridad. Es una situación rara que nunca pensé que se podría dar". El presupuesto tenía que ser presentado por el nuevo gobierno de Perotti, "que es lo que corresponde", apuntó.

 

Capitani coincidió con Calvo que la aprobación de un presupuesto sobre tablas y a menos de 24 horas de haber ingresado a la Cámara era una afrenta al "sentido común". "Es un proyecto que elaboró el gobernador que se va" en 19 días para que lo ejecute el que viene. "Un sin sentido". "No tuve la suerte de leerlo porque recién ingresó ayer (por el miércoles) y ni siquiera se discutió en la comisión de Presupuesto", que preside el propio Calvo.