Fernando Godoy, condenado el año pasado a prisión perpetua por el femicidio de Tamara Merlo, insiste con la libertad luego de que en diciembre la Cámara Penal cambiara la calificación a homicidio culposo y dictara una nueva condena de 3 años. Ayer, en una audiencia con habilitación de feria judicial, la jueza Silvia Castelli escuchó a las partes y a la madre de la víctima, por lo que este mediodía tomará una decisión. "Ella también tenía derecho a vivir, con toda la vida por delante, porque tenía apenas 18 años. Dejo en sus manos esta decisión", le dijo Graciela a la magistrada. 

El miedo a la libertad de Godoy fue expuesta por la familia de la chica -asesinada en junio de 2017- y organizaciones de mujeres que la acompañan, cuando en diciembre pasado la Cámara Penal modificó el encuadre legal de la causa. Godoy llegó a la Alzada con una condena a prisión perpetua por el hecho, pero el caso no se encuadró como femicidio en primera instancia y la condena perpetua tuvo que ver con un homicidio agravado por el uso de arma de fuego. En el proceso penal, el imputado acusó primero a ladrones, después dijo que se le escapó un tiro. Hace tres semanas, la Cámara revocó la pena a prisión perpetua. Los jueces Javier Beltramone, Guillermo Llaudet y Gabriela Sansó dictaron un nuevo fallo: condenar a Godoy, de 23 años, a tres años de prisión efectiva por homicidio culposo (sin intención) y por tenencia de arma de fuego de uso civil. Por eso, piden la libertad. "Se ve que la defensa está apurada en que salga este asesino. Como saben, estamos de feria, pero qué rápido la Justicia le responde a estos asesinos", dijo la madre en un video publicado en las redes sociales.