Desde la Dirección General de Coordinación Epidemiológica, se informó que ya son tres los casos de dengue confirmados en la provincia, aunque se trata de personas que se contagiaron con el virus en otros países.

Uno de los casos fue detectado en un paciente que había estado en la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra. Había viajado a esa ciudad el 31 de diciembre y permaneció hasta el 14 de enero. Al regreso a Salta, consultó en el hospital Señor del Milagro, donde se le diagnosticó la enfermedad; sigue tratamiento médico en forma ambulatoria, con buena evolución.

Los otros dos casos se localizan en la localidad de Las Lajitas, departamento Anta. Ambos pacientes, no pertenecientes a la misma familia, habían estado en Paraguay y Brasil, respectivamente.

Estas personas dieron resultado positivo a los estudios de laboratorio para dengue serotipo 1, reciben tratamiento ambulatorio, con buena evolución.

Desde Salud se informó que se ha intensificado la vigilancia epidemiológica en todo el territorio provincial y en particular en las zonas de mayor riesgo para estas enfermedades. Se recomendó revisar y limpiar patios, jardines, canaletas y todo lugar donde pueda acumularse agua, desechando todo objeto que pueda servir para que el mosquito deposite sus huevos y se reproduzca. También se advirtió la necesidad de descartar botellas, neumáticos y otros objetos, de manera que no puedan ser recogidos y reutilizados por otras personas y no se traslade el reservorio de un sitio a otro.

Se debe cambiar diariamente el agua de bebederos de los animales, cepillar las paredes de todos los contenedores, tapar bien los tanques de agua, sellar pozos ciegos y colocar tela mosquitera en los respiraderos, mantener el pasto corto y desmalezar terrenos, entre otras acciones.

Recomendaciones

Quienes viajen o habiten en zonas con presencia del mosquito vector, deben evitar la exposición al aire libre durante las primeras horas de la mañana y al atardecer, ya que son los momentos de mayor actividad del Aedes aegypti.

Se aconseja usar ropa clara, de mangas largas y pantalones largos, cubriendo el cuerpo cuando se desarrollan actividades al aire libre. Utilizar espirales, tabletas repelentes o insecticidas para ahuyentar a los mosquitos.

Proteger las cunas o cochecitos de los bebés con mosquiteros tipo tul y verificar que permitan una correcta ventilación.

Utilizar productos repelentes sobre la piel expuesta y ropa y renovar su aplicación según las indicaciones del envase. No se recomienda el uso de repelentes en niños menores de dos meses de edad. Para los mayores de dos meses, consultar con el pediatra por el producto más adecuado.

Los niños pequeños no deben aplicarse ellos mismos el repelente: siempre lo debe hacer un adulto. No aplicar repelente en las manos de los niños, ya que podrían llevárselas a la boca. No utilizar repelentes asociados a protectores solares en la misma formulación.

Las mujeres embarazadas o en edad reproductiva deben extremar las medidas de prevención de picaduras de mosquitos, debido a la asociación entre el virus Zika y el riesgo de malformaciones fetales, como microcefalia. Además, los adultos en general pueden presentar consecuencias neurológicas.

Utilizar preservativos en las relaciones sexuales, ya que el zika también se transmite por esta vía.

Si durante el viaje o al regreso se presentan síntomas tales como: fiebre, dolor muscular o articular, vómitos, malestar general o sarpullido; no automedicarse y realizar una consulta médica de inmediato.