“Lo que distingue al hombre del animal es ser un ser ‘inconcluso’, lo que implica su capacidad de tener ‘no sólo su propia actividad, sino a sí mismo como objeto de su conciencia’”.  

Paulo Freire

Educar o domesticar: La variedad de respuestas a las preguntas sobre la condición humana que Paul Gauguin expresa en “¿De dónde venimos? ¿Quién somos? ¿Adónde vamos?”,constituyen el humus de principios y valores sobre el cual cada cultura instala su universo y construye a través de su historia, sus propios paradigmas.

Las representaciones antropológicas y del cosmos de cada modelo regulan las estructuras y estrategias de organización, difusión ideológica y pedagogías afines, apoyando el desarrollo de ciertas capacidades y limitando otras.

A modo de ejemplo, algunas culturas ejercitan órdenes y mandatos y otras cultivan la detección de contradicciones entre ideas y resultados.

En un caso, la mayoría de individuos tolerará ciegas obediencias.

En el otro, cuestionará reglas irracionales.

Habrá docentes y comunicadores estimulando la libertad del ser humano “inconcluso” para que anhele convertirse en su propio “objeto de conciencia” y quienes, aterrados ante la mera mención de completarse a sí mismos, promuevan la sumisión a un único dogma.

Similares discrepancias se verifican en voces y efectos políticos y sociales.

Cuando Javier González Fraga, en una alocución dirigida a los animales domesticados que completan su idea de humanidad, define a niños de villas como “animalitos salvajes”; también expresa su visión antropológica y la pedagogía a la cual adhiere. Desde su perspectiva, los animalitos salvajes no califican como humanos plenos.

Los domesticados, tampoco. 

Aun cuando la imagen y la reflexión están dirigidas a su propio público (personas con mesas mentales tendidas para consumir irreflexivamente los alimentos de una cocina de comunicación hegemónica) cabe destacar se satisfacen con un rancio y precocinado menú; pese al despliegue de un continuum de estrategias antropofágicas de control y mediante aplicaciones tales como:

APP La emulación del tero: El tero esconde sus propios huevos con estridentes denuncias sobre los nidos ajenos.

La emulación de estrategias similares de manipulación, usadas por las modernas técnicas de marketing, alteran las percepciones humanas montando veloces y sucesivos mini espectáculos.

Las escenografías ligeras no evitan la acumulación de toneladas de barro bajo la alfombra pero, íconos y estereotipos reemplazan a reflexiones y cuestionamientos. 

La permanente confusión de las percepciones precede a la aparición de síntomas patológicos; en tanto los teros, actores o espectadores, construyen sus relaciones en base a estrictas razones de conveniencia personal y de grupo e imponen un proyecto rural de control y domesticación de “animalitos” que reemplaza a los docentes por capataces “voluntarios”.

App Cansar al pez: La comunicación como pesca deportiva esgrime infinidad de argucias.

El “trolling” prolonga el arrastre del espectador-pez desde la nave madre de las noticias y los señuelos (elegidos según la presa) tanto pueden moverse y simular diferentes situaciones como reiterar la misma maniobra, hasta que la presa se rinda.

La carnada de notas similares puede ser reemplazada sutilmente o no, una y otra vez, hasta que el sujeto (pez o espectador) esté agotado y no perciba la cercanía del arpón.

Si el pescador tiene paciencia suficiente para soportar y resistir la fuerza del animal y el acecho de otros depredadores; logrará la sumisión a sus acciones y pensamiento dominante, legitimando la intimidación y la violencia.

App Gato por liebre: Resulta atinado afirmar que quienes responden a las preguntas de Gauguin o a la kantiana ¿Qué debo hacer? con “Decí que están mintiendo con la inflación” o “Decí cualquier cosa y hablá de tus hijos”; adhieren a un modelo de sociedad donde impera la ley de la selva y gobiernan los poderosos.

Hace décadas, Bordieu y Passeron (**) demostraron la importancia de la escolaridad en la reproducción de las injusticias y relaciones sociales.

Sin embargo, para lograr sectores de la población que adscriban al doble discurso, se requiere el diseño de estrategias que trascienden al campo educativo: precarización laboral, desindustrialización y desfinanciamiento cultural, con consecuentes pérdidas de derechos.

Políticas que solo pueden consumarse, mediante la violencia y la complicidad de una comunicación fingidamente plural y democrática.

La educación de seres humanos aparece en este contexto.

Los domadores disponen de grillas de aplicaciones para conseguir su zoológico.

No les será sencillo lograrlo.

Muchos seres humanos aún defienden a las criaturas de su propia especie.

* Antropóloga UNR.

** “Los herederos”.