La Asociación Meretrices de la Argentina en Acción por Nuestros Derechos (AMMAR) anunció que realizará un proyecto de ley para la legalización del trabajo sexual y pidieron al estado la implementación de “políticas públicas y alternativas laborales para aquellas personas que quieran otra opción”.

“No vamos a retroceder los 25 años que llevamos de organización sindical”, sostuvo la secretaria General Nacional de AMMAR, Georgina Orellano, en una conferencia de prensa realizada en la sede de la Asociación. Adelantó también que pedirán la “reforma de la Ley de Trata que criminaliza a muchas compañeras por el solo hecho de organizarse”. 

Orellano afirmó que AMMAR “es parte de un movimiento obrero” y acusó a los que estigmatizan y generan una “criminalización hacia la única herramienta que es la sindical, que como trabajadores y trabajadoras supimos construir”. 

“La única salida es colectiva, sindical y política”, sostuvo y agregó que “el Estado no debe mirar para otro lado”. La secretaria de AMMAR informó que “en el próximo mes haremos un plenario para acelerar el proceso de discusión en el Congreso Nacional para la despenalización social del trabajo sexual y en un marco más legislativo para seguir trabajando en mejores condiciones laborales”. 

“En una o dos semanas más no se hablará más de nuestra vida, no han mejorado las condiciones laborales ni le han salvado la vida a nadie”, afirmó Orellano en referencia a la repercusión mediática que tuvo la viralización de la campaña de publicidad que realizó la actriz y cantante Jimena Barón para promocionar su nuevo tema denominado “Puta”, en la se la podía ver posando al lado de un afiche con la estética que utilizan las redes de prostitución. 

Nos solidarizamos con Jimena Barón y que nunca más se hostigue a nadie que quiera levantar la bandera de los derechos a decidir sobre nuestros propios cuerpos”, finalizó Orellano. Por último, Orellano consideró que si el Estado no se involucra, “vamos a seguir trabajando en la clandestinidad sin reconocimiento de ningún derecho y expuestas a la violencia policial y simbólica”.