Este domingo quedó detenido el principal sospechoso de asesinar a un niño de cuatro años y violar a su madre en la localidad santacruceña de Puerto Deseado. La decisión la tomó el juez Oldemar Villa luego de que la mujer identificara a su agresor en rueda de reconocimiento. También se encuentra detenido un adolescente de 16 años, que sería cómplice del crimen, a la espera de que se le realice a él también una rueda de reconocimiento. En este marco, se llevó a cabo en la ciudad una nueva movilización en pedido de justicia. Además, los vecinos desbordados por la ira, cuestionan el obrar del juez, que había liberado a los sospechosos el viernes "por falta de requerimientos probatorios". El juez lo había resuelto ya que no se había realizado el reconocimiento, pero, como correspondía, mantuvo vigilancia sobre ambos para evitar su fuga.

En la madrugada del domingo, luego de finalizar la primera rueda de reconocimiento en el marco de la causa, el juez Oldemar Villa informó mediante un comunicado que "se confirma la detención del joven que la policía de Santa Cruz puso a disposición de la justicia" y agregó que "la policía sigue trabajando en el esclarecimiento de los hechos y ha aportado evidencia y elementos probatorios que permitieron avanzar en la investigación y ordenar la detención del joven identificado en la rueda de reconocimiento". La mujer violada reconoció a su agresor por su fisonomía y su voz.

El juez Villa también confirmó que el joven de 24 años padece de esquizofrenia, aunque aclaró que eso no lo hace inimputable. El diagnóstico del hombre está acreditado en su historia clínica. Además, el joven tiene antecedentes penales: había sido demorado el mes pasado en el marco de otra causa tras haber sido denunciado por la "tentativa de homicidio" de un familiar suyo también menor de edad, pero la Justicia lo liberó. El joven arrestado es el mismo que había sido detenido el viernes pasado, junto con un adolescente de 16 años, luego de ser identificados gracias al testimonio de testigos y al identikit realizado en la jornada del jueves. El mismo día, el juez Villa había decidido liberarlos "por falta de requerimientos probatorios", es decir, faltaba el reconocimiento ya que el identikit no es prueba valedera.

En este sentido, el domingo por la tarde se realizó una nueva movilización en la ciudad para reclamar justicia en la creencia de que el juez debía mantener detenidos a los sospechosos aunque no existieran pruebas. De la marcha, que fue desde la Municipalidad hacia el Juzgado de Instrucción, participaron cientos de personas que llevaban carteles con leyendas de apoyo a la víctima. Cecilia Oyarzo, la vecina que auxilió a la mujer luego de encontrarla caminando ensangrentada por la playa, participó de la movilización y afirmó que "hay mucha gente que se acercó con carteles de casos que quedaron impunes. Este caso fue un detonante”. En este sentido, los vecinos denuncian otros casos en los que intervino el magistrado: aseguran que el mayor problema del lugar es la presencia de narcotraficantes y que muchas causas están bajo la órbita del juzgado de Villa.

Por otra parte, en las últimas horas se creó un petitorio en la página web change.org con la consigna “Pena de muerte en Argentina (para crímenes como el de Puerto Deseado)”. Por el estado de ánimo general de la ciudad, el juez Villa decidió trasladar al detenido a una sede policial de la ciudad de Caleta Olivia para evitar cualquier tipo de reacción violenta que pueda haber por parte de los vecinos. En Caleta Olivia, el detenido será indagado por el magistrado en los próximos días.

Según fuentes judiciales, fue la propia hermana del hombre detenido la que el sábado contó a los investigadores que él le había confesado el crimen y la violación, por lo que el juez volvió a demorarlo y finalmente ordenó su detención para realizar la rueda de reconocimiento donde fue identificado. El magistrado también volvió a detener al adolescente de 16 años y ahora se espera la realización de ruedas de reconocimiento para ver si es identificado por la víctima. En el marco de las investigaciones, también se realizaron allanamientos en los domicilios de los detenidos, donde se encontró ropa con manchas de sangre que serán sometidas a exámenes de ADN, lo mismo sucederá con los rastros de sangre y piel encontrados en las uñas de la mujer que intentó defenderse del ataque.