Como en la parábola bíblica del hijo pródigo, así fue recibida la delegación salteña en el Congreso Nacional del Partido Justicialista que se realizó ayer en el micro estadio de Ferrocarril Oeste de la ciudad de Buenos Aires.

En reiteradas oportunidades, referentes del PJ remarcaron la importancia de la presencia de los salteños y los cordobeses, que retornaban a un congreso partidario después de uno y diez años respectivamente.

En el caso de Salta, la ausencia en el 2019 fue a raíz de la por entonces pre candidatura a presidente de Juan Manuel Urtubey, quien vislumbrando que en el congreso se iba a dar el apoyo a Cristina Fernández como postulante a la Casa Rosada, decidió en su carácter de titular del PJ local no enviar a los congresales. Curiosamente Urtubey y Cristina finalmente no encabezaron ninguna fórmula, sino que secundaron a Roberto Lavagna y Alberto Fernández.

El presidente nacional del PJ, Jose Luis Gioja, el titular de Congreso justicialista, Gildo Insfran y el presidente del peronismo bonaerense, Fernando Gray, fueron algunos de los jerarcas del PJ que consideraron la presencia de Salta como gesto de unidad que puede convertir al partido en la columna vertebral del gobierno nacional.

Los congresales salteños que viajaron apoyaron sin objeciones el documento que se aprobó en forma unánime en el Congreso, y que tenía como uno de sus ejes principales el apoyo a la gestión encabezada por los Fernández.

A pesar de la crisis institucional que vive el PJ salteño, en Buenos Aires la delegación se mostró amalgamada detrás de Alberto, y la adhesión al documento se hizo sin ningún tipo de observación, ni cuestionamiento alguno

“El PJ comparte la postura del presidente de todos, Alberto Fernández, cuando afirma que los recursos para pagar la deuda no serán producto del hambre y la destrucción de los sueños de las familias argentinas”, señala uno de los párrafos del texto aprobado.

Aunque se había especulado con la presencia del presidente argentino en el lugar, finalmente no fue, pero envió a su primera línea política, encabezada por los ministros Santiago Cafiero y Wado de Pedro.

Además durante el Congreso se aprobó la memoria y balance del año y la intervención de la regional del PJ correntino. Hasta hace un tiempo se especulaba que el PJ salteño podría correr idéntica suerte, sin embargo se terminó descartando esa posibilidad ante las expectativas de una salida consensuada e institucional de la crisis que enfrenta.

Igualmente algunos dirigentes locales aprovecharon el evento partidario para hacer conocer el estado de la situación a las autoridades y referentes nacionales, y es posible que, descartada la intervención, haya una atención especial y mayor injerencia desde Buenos Aires sobre el andar del justicialismo salteño.

Otro de los puntos que se trató en la reunión fue la designación de la Junta Electoral y se resolvió convocar a elecciones para el 3 de mayo. Igualmente hasta esa fecha los esfuerzos del Pj irán en tratar de tener una lista única de unidad.

Entre los nombres que suenan se encuentra el de Gioja, Jorge Capitanich y el propio Alberto Fernández, a los que se les puede sumar alguno de los intendentes del conurbano bonaerense.

La delegación salteña estuvo compuesta por Pablo Kosiner, Mashur Lapad, Santiago Godoy, Marcelo Lopez Arias, Gustavo Soto, Mur Reinaga, Rossana Cabezas, Pedro Sandez, Osvaldo Salum, Edith Cruz, Maria López, Hernán Cornejo, Moises Sánchez y Belen Flores, a los que acompañaron el diputado nacional Lucas Godoy y el subsecretario de Relaciones con Provincias de la Nación, Emiliano Estrada.

Enojo Saencista

En medio de la avanzada del saencismo sobre el Partido Justicialista, que se concretaría con la asunción de Pablo Outes como titular de la Comisión de Acción Política, cayó mal en algunos sectores oficialistas el apoyo a Fernández y que no se tome idéntica actitud con el gobernador salteño.

El vocero de ese enojo fue el histórico dirigente isista, reconvertido al saencismo en los últimos años, Dante Rosas, que en su cuenta de facebook reclamó a algunas autoridades del PJ "gratitud" y se declare "una proclama de apoyo del PJ orgánicamente a la gestión del gobernador de la provincia".

La diferencia con el apoyo al presidente Fernández radica en que fue el candidato a presidente del PJ, mientras que Sáenz llegó a la gobernación en una coalición de varios partidos entre los que se encontraba un sector del radicalismo y del macrismo, pero que no incluía el justicialismo, que se encolumnó detrás de Sergio Leavy.

Rosas calificó a Sáenz como "el misericordioso" y denunció que el mandatario "solucionó temas personales y laborales de algunas autoridades del PJ y/o grupo familiar".

Además expresó que sin revanchismos está acudiendo al salvataje de la estructura partidaria. "Lo hace muy a pesar de haber sido víctima de traiciones y vilipendios de parte de ellos mismos".

Justamente uno de los principales problemas que afronta el PJ es el abrupto desfinanciamiento que sufre por las suspensión de los aportes que hacían los empleados públicos afiliados al PJ, que ahora deben hacer sus aportes al partido PAIS del gobernador Sáenz. 

A partir de ese hecho la crisis se precipitó en la sede de calle Zuviría, lo que abrió las puertas al ingreso de un sector del saencismo que llegaría con fondos frescos para poder garantizar el funcionamiento del partido.