#ESIENCASA es la consigna de una ong que invita a cinedebate, videos, lecturas específicas para pensar la afectividad, la diversidad sexual, las relaciones, con el coronavirus confinándonos. Otra propone un juego virtual para deconstruir estereotipos de género y prevenir la violencia. La educación sexual integral no se detiene. Ahora se trata de que la ESI sea virtual. Así lo plantean organizaciones sociales que desarrollaron distintos materiales para trabajar los contenidos de la ley a pesar de que las escuelas ya no funcionen en las aulas tradicionales.

Este año, sin saber que la pandemia iba a cambiar nuestra vida por largos meses, la Fundación Kaleidos lanzó el juego virtual El Deconstructor , dedicado a adolescentes con una guía para docentes y profesionales que trabajan con esta población. El juego busca promover, a través de situaciones cotidianas, videos y fotos, el intercambio grupal o la reflexión individual acerca de E.S.I., vínculos violentos, estereotipos y mitos.

"¿Para vos hay actividades exclusivas para hombres y para mujeres?", es la primera pregunta del juego, buscando desarmar los estereotipos de género. Hay tres opciones para responder y luego se avanza en el juego con información que busca la reflexión acerca de la pregunta e invita a seguir al escalón siguiente. Así se va avanzando en una serie de consignas que abordan algunos aspectos que la ley de educación sexual plantea como contenidos obligatorios en las escuelas. En otro punto, por ejemplo, el juego aborda el concepto de identidad de género e invita a ver un video donde se explican las diferencias entre tantas palabras nuevas que circulan y pueden resultar confusas especialmente para quienes están en un momento estructurante de su subjetividad: género, identidad de género, sexo biológico, expresión de género y orientación sexual. El juego está acompañado por una guía para docentes o talleristas, ya que la fundación trabaja en escuelas pero también en clubes deportivos o espacios no educativos.

“Nos propusimos tratar de que los docentes puedan trabajar la ESI con sus alumnos, o talleristas con adolescentes, entonces, además empezamos a generar espacios virtuales todos los miércoles a las 14 hs para ver cómo se trabaja a partir del juego. Nos dimos cuenta también que los docentes no saben usar la virtualidad. No es solo el juego sino cómo usar la plataforma”, contó Lucía Sucari, responsable de Comunicación de Kaleidos.

¿Por qué es importante seguir trabajando ESI en este nuevo escenario de distanciamiento que plantea la pandemia del coronavirus? Uno de los objetivos principales de la fundación es trabajar en la prevención del embarazo adolescente; actividad que desarrollan en Traslasierra, Córdoba, y en el barrio de Chacarita, acompañando a madres y padres adolescentes y a sus hijes. “Nos dimos cuenta de que teníamos que sensibilizar a la sociedad sobre la temática. Y creemos que una manera de prevenir el embarazo no intencional en la adolescencia es la ESI”, explicó. Además, a casi dos meses del aislamiento social obligatorio empezaron a aparecer nuevas problemáticas: “cómo la ESI llega adolescentes, cómo acompañar a las familias en la distancia, como acompañar a adolescentes que están en situaciones de violencia en las casas… Cuando el adolescente está en la casa no tiene la misma capacidad de transmitir al equipo lo que le pasa. Así que estamos pendientes y buscando la manera y los modos de seguir acompañando”. Es cuidar un poco al que cuida y acompañar al que acompaña.

Casa Fusa es otra organización que llega a adolescentes con el eje puesto en la implementación de la ESI. “Trabajamos con instituciones educativas, escuelas privadas y públicas, con docentes, adolescentes y la familia”, contó Daniela Giacomazzo, coordinadora del área de expansión comunitaria. Como una forma de dar apoyo en el marco de la cuarentena desarrollaron materiales para trabajar los contenidos de la ESI, organizados para dos grupos etarios: de 10 a 14 y de 14 a 17. Son recursos tanto para docentes como para las familias. Contenidos descargables, disponibles on line, que van recorriendo diferentes temas. Ya sacaron dos, y se viene un especial sobre aborto, edición verde, este mes. En el primero, por ejemplo, uno de los ejes a trabajar es el valor la afectividad y está centrado en los sentimientos, los valores y las emociones en el marco de los vínculos y las relaciones sociales. Fomenta respetar la intimidad propia y ajena y rechazar toda manifestación coercitiva del afecto, y al abuso y violencia de género y sexual. Lo hacen a través de distintas actividades, para chicos de 10 a 14 años, por ejemplo, proponen algunos videos para pensar ¿cuándo una relación es saludable y cuándo no? Y ¿de qué hablamos cuando decimos “consentimiento”? Mientras que para los más grandes, proponen materiales para pensar en la violencia que puede aparecer en los noviazgos y reflexionar sobre el amor, los celos y cómo el patriarcado determinó las formas de relacionarse.

Según Giacomazzo, en la coyuntura que impuso el coronavirus es fundamental insistir con la ESI: “Es un derecho constituido para niños, niñas y adolescentes. Y este contexto nos interpela a pensarnos subjetivamente y en esa interpelación como seres sexuados estamos atravesados por la sexualidad. Porque la ESI nos da herramientas para poder pensar en relación a la vivencia del cuerpo, de lo emocional, del afecto, de la relación con el otro. En los adolescentes el contexto actual modifica la situación cotidiana y también la familia se ve interpelada”.

También este momento puede pensarse como oportunidad para hablar de temas que en otros no se podía. Esa es la apuesta: que la pandemia no haga retroceder los derechos conquistados. #ESIENCASA #ESIVIRTUAL.