El ministro de Seguridad, Marcelo Sain, resolvió ayer remover de su cargo al subjefe de la policía Martín Musuruana. El desplazamiento está relacionado a los resultados que arrojaron las investigaciones internas que derivaron en la intervención de la Unidad Regional I, procesos en los que incluso se indagan posibles vínculos con el narcotráfico. Antes de desempeñarse como subjefe de la Policía de Santa Fe, Musuruana, fue durante mucho tiempo titular de la PDI en la Unidad Regional I. El desplazado será reemplazado por Emilce Chimenti, que estaba al frente de la Unidad Regional IV del departamento Caseros.

La versión oficial habla de irregularidades, de un recrudecimiento del delito a pesar de la cuarentena, de dos policías protagonizando un hecho escandaloso en la zona de la costa y de la fuga de presos en comisarías. Aunque por el momento las investigaciones se mantienen en reserva y los detalles se manejan con lógica cautela, la remoción de la cúpula de la Policía de la Unidad Regional I -departamento La Capital- y del Comando Radioeléctrico tuvo como detonante, una vez más, al narcotráfico. Existen datos que avalan la hipótesis de que los narcos y ciertos sectores de la Policía del Departamento La Capital venían operando de manera coordinada.

Durante la noche del viernes 1 de mayo, se realizaron allanamientos en el Comando de Santa Fe y otras dependencias policiales. Se secuestraron libros de guardia y elementos importantes en el marco de investigaciones realizadas por Asuntos Internos y la Unidad de Delitos Complejos del Ministerio Público de la Acusación (MPA).

En rigor no es la primera salida sorpresiva de un jefe policial: el 18 de diciembre de 2019, Sain anunció que el nuevo jefe de la Policía de Santa Fe sería Víctor Sarnaglia y planteó su decisión de pasar a retiro a más de 30 altos jefes policiales de distintas jurisdicciones. Se trató de un recambio general que abría la posibilidad de nuevos y mejores tiempos. Sin embargo, las expectativas no duraron demasiado. Once días después de haber asumido como jefe de la Unidad Regional II, en el Departamento Rosario, el ministro decidió relevar de su cargo a Claudio Romano. También dispuso cambios en la Unidad de Orden Público. Los cambios repentinos se debieron, según señalaron altas fuentes del Ministerio de Seguridad a Aire de Santa Fe, a que no se acataron las directivas de la cartera que conduce Sain. La salida de Romano se produjo luego de que se produjeran doce crímenes en nueve días en Rosario desde el inicio de 2020.

Solo pocas horas después el lunes 13 de enero, el comisario mayor Javier Gorosito, flamante jefe de la Unidad Regional IX de Policía de Reconquista, también debió ser apartado de su cargo. Pocos días resultaron suficientes como para que Seguridad comprobase que no era la persona indicada para ocupar ese puesto. "Cuando los jefes no cumplen las directivas y no dan un servicio a la comunidad acorde a los medios con que cuenta, nosotros tenemos que hacer que se corra a un costado y  deje el lugar a otro que quiera, que sepa o que pueda cumplir con esos objetivos", dijo en aquella oportunidad Víctor Sarnaglia a la radio Aire de Santa Fe.

En el departamento La Capital, Daniel Filchel asumió el 4 de marzo como jefe de la Unidad Regional I. Su gestión apenas duró diez semanas. Y los resultados están a la vista: fue reemplazado en su cargo por la interventora Marcela Alejandra Muñoz.