Pasaron dos semanas de la represión que tuvo lugar en las puertas de la Legislatura por parte de la Policía de Salta a los remiseros. El saldo de ese jueves 11 fueron siete trabajadores heridos y detenidos y dos policías también resultaron con lesiones. Hasta el momento, el caso no avanza y los trabajadores continúan detenidos, aunque seis están con prisión domiciliaria y uno aún permanece en la Alcaidía General de la Ciudad Judicial. La fuerza de seguridad señala a este último como el causante de las heridas a uno de los uniformados.

Desde las 11.30 de hoy los trabajadores del remis y familiares de los detenidos se manifestarán en la plaza General Güemes, frente a la Legislatura. La familia exige que se les otorgue la libertad y se les quiten los cargos por los cuales se los acusa, teniendo en cuenta que se habla de penas que van de cinco a diez años por lo que no son excarcelables. Además, al estar con prisión domiciliaria, no pueden salir a trabajar, algo que no es menor en el caso de personas cuyos ingresos dependen de la recaudación diaria con los remises. 

La convocatoria se inició al saber que al mediodía el ministro de Seguridad de Salta, Juan Manuel Pulleiro, junto al secretario de Seguridad, Benjamín Cruz, y la jefa de Policía Norma Morales se presentarán ante los diputados para responder sobre los hechos de violencia policial que se denunciaron en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara

Uno de esos remite a la represión que sufrieron los remiseros. Dos horas antes, el comisario Daniel Enrique Catacata deberá presentarse ante la Fiscalía Penal 2 en la calle Santiago del Estero 611 para prestar declaración testimonial. Catacata es uno de los dos efectivos heridos en el episodio.

“El punto concreto es que le den la libertad a los detenidos”, manifestó a Salta/12 la inspectora de la Unión de Conductores de Autos al Instante y Remises de la República Argentina (UCAIRRA), Patricia Paz. Además, sostuvo que “no se dan las explicaciones ni las razones de por qué siguen detenidos”. 

Los detenidos son Joel Salvador, Juan Vega, Hugo López, Francisco Flores, Martín Cruz, el delegado de la Unión de Conductores de Remises y Afines de Salta (UCRAS), Sergio Salinas y Marcos Angel José Carabajal. Este último sigue preso en la Alcaidía dado que es señalado como el trabajador que hirió a Catacata. Los siete están acusados de “coacción agravada, resistencia a la autoridad, daños calificados y lesiones en perjuicio del personal policial”.

Es por eso que pedirán a Pulleiro explicaciones de lo sucedido y las razones por las que “nadie se juntó con los familiares para ayudarlos económicamente, dado que son los trabajadores las cabezas de familias y no pueden salir a trabajar”, manifestó Paz. En ese sentido, el abogado de los trabajadores, Rodrigo Anachuri, contó a Salta/12 que presentó un pedido para que se les permita salir a trabajar a los trabajadores que están con domiciliaria. La presentación la realizó a principios de esta semana y aún no obtuvo una respuesta por parte del juez Diego Rodríguez Pipino, quien está a cargo del Juzgado de Garantías 4.

Por su parte, Salinas sostuvo que al no saber los fundamentos por lo que están detenidos “no nos dan la posibilidad de defendernos, parecería que no hay ninguna prueba”. En relación a Carabajal dijo que “ellos (los policías) dicen que fue Carabajal quien tiró la piedra que hirió a uno de ellos, y por eso también le dieron una tremenda golpiza. Tiene la cara desfigurada”, expresó.

El representante sindical afirmó que no le dieron motivos en ningún momento para el accionar de la Policía. "Nosotros fuimos detenidos porque no corrimos y nos quedamos ahí porque consideramos que no estábamos cometiendo ningún delito”, dijo. Cuestionó que el Palacio Legislativo fue utilizado como “un centro de detención”. De acuerdo a la reconstrucción de los hechos, los detenidos fueron llevados al interior del edificio y allí se los colocó en fila mirando a una de las paredes, mientras que “a un compañero que le secuestraron el auto lo trajeron dos policías de la motorizada y también lo tenían contra la pared y le pegaban”, recordó Salinas a Salta/12. 

Después de permanecer horas en la Legislatura el delegado relató que fueron llevados a la Seccional Primera, pero nunca bajaron del vehículo. Acto seguido, “nos llevan a la Alcaidía para que nos revise el médico legal y ahí, Carabajal se descompensa. Nos derivan al Hospital San Bernardo a todos y él queda internado. Recién lo vimos a las 5 de la mañana del viernes 12 cuando lo llevaron a la Alcaidía”, relató el representante de los remiseros. 

“Fueron a la Legislatura pidiendo una mejora en su trabajo y terminaron presos por manifestarse”, reprochó Paz.