Cristina Castro, casi sin voz de tanto dolor pero con entereza, sigue buscando a su hijo. Mientras se despliega el mega operativo con centenares de efectivos de las fuerzas federales, drones y perros ella hace una solicitud a la justicia pero no recibe respuesta. La madre del desaparecido Facundo Astudillo Castro pidió hace dos días al fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez y a la jueza federal María Gabriela Marrón la intervención del instructor canino Marcos Herrero en los procedimientos de rastrillajes que se están realizando para encontrar al joven de 22 años, que salió el 30 de abril de su casa en Pedro Luro hacia Bahía Blanca pero nunca llegó. Herrero y su perro Duke fueron quienes encontraron en mayo de 2016 el cuerpo de Micaela Ortega, víctima de grooming seguido de femicidio. Entre otros casos, participó en el rastreo de Araceli Fulles, del oficial Lucas Muñoz en Bariloche y el de Santiago Maldonado, donde Duke encontró en las aguas del río Chubut un collar negro con un colmillo de jabalí que tenía el nombre de Santiago.

"¿Esperaran que la madre salga a buscarlo como lo tuve que hacer yo? Queremos a Facundo ya. No se olviden que Duke y su entrenador fueron quienes encontraron el cuerpo de Mica y pruebas que a la Científica se les pasó por alto", afirmó su mamá, Mónica Cid, a FM De la Calle Ante la dilación de los funcionarios judiciales, Castro hizo su pedido en las redes sociales. "Pido me ayuden con esto, necesito que en el rastrillaje esté presente Marcos Darío Herrero con sus perros, lo pedí a la justicia y está dando vueltas y vueltas, quizás si todos pedimos a Marcos me escuchen, confío en él y en sus perros", escribió la mujer en Facebook. Sus abogados insistieron con un escrito ante el fiscal Martínez, al tiempo que solicitaron la apertura del sobre donde está guardado el libro de guardia de la comisaría de Mayor Buratovich, para cotejar la identidad de los policías que se habrían llevado a Facundo y pedir su detención.

La participación de perros adiestrados en la búsqueda de personas desaparecidas quedó en evidencia luego de que varios de estos canes resolvieran casos de resonancia. Los perros de Herrero, Duke y Alcón, son considerados como los más preparados del país para la búsqueda de personas y de restos humanos. En abril de este año, Alcón encontró el cuerpo sin vida de Araceli Fulles, enterrado en San Martín, cubierto por una capa de cemento. En mayo, ambos animales aportaron elementos claves en la causa por el femicidio de la adolescente Daiana Garnica, en Tucumán. Semanas atrás los perros volvieron a ser destacados por la resolución del conmocionante asesinato de Micaela Ortega en Bahía Blanca y por el triste hallazgo de Delfina Aciar, la nenita de 3 años que fue encontrada ahogada en un desagüe de General Roca. 

Duke, un sabueso bloodhound, y Alcón, un ovejero sable, también permitieron encontrar los restos del joven de Las Grutas, Rodrigo Hredil, fueron fundamentales en el esclarecimiento del femicidio de Karen Álvarez en Viedma, y en las búsquedas de Lucas Muñoz en Bariloche y de Santiago Maldonado en el sur de Chubut. Los perros pueden llegar a encontrar huesos humanos de personas que están desaparecidas por un máximo de 10 años, cuando el cuerpo ya está degradado si han sido entrenados con el método Cinotec desarrollado por Aldo Cecchi en Córdoba. "Cada persona tiene un olor único, que está formado por sustancias químicas como las feromonas, y una energía única, es una combinación similar a una huella digital, como el ADN", dijo Herrero al portal VDM Noticias. El adiestrador, que vive en Viedma, es Bombero Voluntario y realiza búsquedas con sus canes a pedido de la justicia. También se desempeña como instructor y capacitador de perros con el Método Cinotec para la Unidad Canina K9 de la Policía de Río Negro. Con la misma técnica que desarrolló, y a pedido de las personas, con su perro Duke busca mascotas perdidas por mucho tiempo. Cuando habla de su origen ancestral se reconoce “mitad español y mitad mapuche/tehuelche”.

.