La misma investigación que tiene como imputados y con prisión preventiva a los fiscales Gustavo Ponce Asahad y Patricio Serjal, ayer dio un paso adelante con la imputación por los delitos de asociación ilícita, administración y/u organización de sistemas de captación de juegos de azar contra David Perona, quien fue detenido el viernes pasado en la ciudad de Rafaela. 

El juez Florentino Malaponte dictó la prisión preventiva por el plazo de ley. Le imputaron "haber integrado una red de administradores de casas de juego ilegal. Dicha organización está integrada al menos por (el empresario del juego) Leonardo Peiti, (el expolicía) Alejandro Torrisi y Maximiliano 'Cachete' Díaz --todos ya imputados en la causa--, al menos desde el 27 de junio de 2018". 

"Los integrantes de esta asociación ilícita en sus diversos roles tenían por objeto la organización y explotación económica de salas de juego clandestino en distintas localidades de la provincia de Santa Fe, entre ellas en la ciudad de Rosario, Villa Gobernador Gálvez y Rafaela", expresaron los fiscales de la Agencia de Delitos Complejos que están a cargo de la investigación. "En su rol de integrante hizo circular dinero obtenido en forma ilícita a través de la modalidad de préstamo de dinero cambiando cheques. En ese rol, además participaba en la administración de -al menos- la sala de juego clandestino ubicada en calle Comandante Espora al 200 de Villa Gobernador Gálvez. Al menos desde el 10 marzo de 2020, administraba un negocio sito en calle Tucumán al 300 de la localidad de Rafaela que aparenta funcionar como un kiosco en donde se llevan a cabo cargas de dinero a distintas páginas web de juegos de azar, obteniendo usted un lucro ilícito, careciendo esta actividad de autorización legal por parte de la entidad competente en la materia en la provincia de Santa Fe", reza la acusación.

Perona, fue detenido la semana pasada en la ciudad de Rafaela. Cayó tras cinco allanamientos en los que también se secuestraron cuatro vehículos de alta gama y una  suma de más de 1.000.000 de pesos, 15.000 dólares y piezas de oro. El operativo fue impulsado por los fiscales de la Agencia del Crimen Organizado de Rosario Matías Edery, Luis Schiappa Pietra y Gisela Paolicelli, que también investigan a Torrisi, Díaz, Peiti y --por las declaraciones de Peiti como arrepentido-- a los fiscales Gustavo Ponce Asahad y Patricio Serjal. 

Llegaron a Perona a partir de información obtenida de un pendrive secuestrado durante el allanamiento a la secretaria de Peiti donde había valiosa información para la investigación.