Los intensos días porteños de Cristina Castro, la madre del joven de Pedro Luro desaparecido desde el 30 de abril, tuvieron su punto culminante el miércoles por la tarde cuando fue recibida en la Procuración General de la Nación y declaró en el marco de la denuncia que había presentado por presuntas irregularidades cometidas por el fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez. "Flete a sus abogados, acá tenemos otros", le habría dicho la secretaria de Martínez a Castro, según aseguró la madre, la única vez que fue recibida en la fiscalía de Bahía Blanca. La secretaria, según Castro, se ofuscó porque esto, además, habría sucedido en un despacho adonde la habían llevado a solas. La madre de Facundo declaró que cuando exigió ver al fiscal le respondieron que no iba a ser posible porque se había ido a "volar en helicóptero". 

La denuncia contra Martínez en la Procuración había sido presentada por la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), y su abogada Margarita Jarque, que acompañó a Cristina durante la declaración, destacó que en los próximos días las querellas acompañarán esos dichos con las pruebas del expediente.

Además de la promesa de obsequiarle un cachorro del perro presidencial Dylan, la madre de Facundo comentó que cuando estuvo en la quinta presidencial la ministra Sabina Frederic le aportó importante documentación que ella no había podido obtener para la causa de parte de la Policía Federal de Bahía Blanca. Pero salvo ese hecho concreto, la mayoría de los funcionarios con los que se entrevistó junto con sus abogados, Luciano Peretto y Leandro Aparicio, le respondieron que "no podían hacer nada" ante sus reclamos por las "desviaciones, dilaciones y encubrimiento" que denuncian está sucediendo "desde el primer día" en la investigación por la desaparición forzada de su hijo. 

En ese contexto, Castro fue escuchada por el jefe de los fiscales del país, Eduardo Casal, y los secretarios de Disciplinaria y Técnica, Juan Manuel Casanovas, y de Coordinación Institucional, Juan Manuel Olima, y estuvo acompañada por la coordinadora del Programa de Atención a Víctimas de Violencia Policial de la DOVIC (Dirección de Orientación, Asistencia y Protección a la Víctima) de esa institución Paola Rosero Jiménez.

La madre de Facundo relató que había pedido en su momento una entrevista personal con el fiscal Ulpiano Martínez y que para ello fue atendida por una profesional a la que identificó como Silvina Pasquaré quien se presentó como representante de ese organismo. El día de la entrevista, dice la denuncia a la que accedió Página|12, la mencionada profesional le pidió hablar a solas, que sus abogados "queden afuera". Cristina "le había avisado unos días antes a Silvina Pasquaré quien se desempeña en la fiscalía pero se presentaba como personal de la DOVIC". Sostuvo que al llegar, "fue encerrada en una habitación y Pasquaré le preguntó por qué había elegido a los doctores Aparicio y Peretto, que en lugar de ellos les ofrecía otro abogado de ahí de la fiscalía", y agregó que "esa era una de las funciones de DOVIC". Cristina percibió "como que no lo querían a Aparicio en la causa", ante lo cual recordó: "Me re calenté y pedí esperar al fiscal".

La denunciante continuó afirmando que Pasquaré le contestó que el fiscal Martínez "no iba a concurrir ya que se había ido a volar en helicóptero". Cristina esperó, volvió a llamar pero nunca tuvo respuesta ni fue recibida. Luego Pasquaré siguió presentándose como personal de la DOVIC, mientras que Rosero Jiménez, "quien pertenece realmente a la DOVIC intentaba contactarse sin éxito porque Castro había perdido la confianza", afirma en el escrito.

Otro dato que está resaltado en la denuncia es que el 18 de julio le informaron que debía presentarse en la fiscalía porque la acompañarán para realizarle un hisopado para las muestras de ADN. Pero que cuando vio que aparecía la misma profesional de apellido Pasquaré no quiso saber nada más con ella, y que por otra parte ya había tomado contacto con Rosero Jiménez por lo que comenzó a distinguir entre quienes eran verdaderamente de la Dirección de Atención a las Víctimas de la Violencia Policial y quienes eran de la fiscalía. 

En la declaración, la madre de Facundo mencionó que “lo increpó (al fiscal Ulpiano Martínez) porque estaba ‘filtrando información’”, y recordó que “el fiscal nada hacía, miraba para otro lado” mientras toda la información que ella no podía ver en la causa “le había sido dada por el Fiscal a un medio local denominado La Brújula y La Nueva. La mujer, --de 42 años empleada de una estación de servicio en Pedro Luro, madre sola con tres hijos-- contó que su padre, César, se descompensó al ver en los medios información sobre su nieto que la familia nunca había recibido a través de los canales formales de un proceso judicial. En el mismo sentido recordó que La Brújula tuvo la foto en color en la que se ve a Facundo de espaldas, detenido al lado de un patrullero, “antes que la tuviese ella o sus abogados, quienes sólo la tenían en blanco y negro”. La querella entiende que esa foto sólo pudo filtrarse a través de la Fiscalía y que una cuestión similar aconteció con la foto del DNI de Facundo. Cristina dijo que Martínez “no ha respetado la confidencialidad necesaria para el resguardo de aquellas personas a las que se les ha reservado identidad”. Al finalizar su denuncia ante la Procuración General de la Nación, la mujer pidió “una actuación más coordinada” en la causa de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin). Incluso manifestó que “le encantaria que el fiscal diga ‘me corro y que siga sólo la Procuvin’.