El Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) exigió la liberación de dos de sus líderes a cambio de entregar al exvicepresidente Óscar Denis Sánchez. El grupo guerrillero dio ocho días como plazo máximo sino ejecutarán al exvicepresidente. Además, solicitó que la familia de Denis Sánchez entregue provisiones por dos millones de dólares a las comunidades indígenas de la zona. El exvicepresidente había sido secuestrado junto con su empleado Adelio Mendoza el jueves en el departamento norteño de Concepción. A treinta kilómetros de allí, ocho días antes, dos nenas argentinas habían sido baleadas durante un operativo del ejército paraguayo contra el EPP. El gobierno de Mario Abdo Benítez recibió el viernes un equipo especial del ejército colombiano para dar con el grupo guerrillero. La Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (CODEHUPY), emitió un comunicado denunciando que el EPP esta usando politicamente a las comunidades indígenas. “Nos parece inaceptable que usen con fines propagandísticos los derechos insatisfechos de los pueblos originarios”, sostuvo Oscar Ayala, secretario ejecutivo de la organización.

Las exigencias del EPP

Las hijas de Denis mostraron la bolsa que dejaron los secuestradores con un mensaje dirigido a la familia. “Estaba a 2.000 metros del lugar donde interceptaron a mi padre, una bolsa que dice favor entregar a la familia de Óscar Denis, con la frase ´Viva el EPP´, con un memory card donde mandaron los requerimientos", expresó Beatriz Denis. Los guerrilleros exigieron que se libere en un plazo de 72 horas a Carmen Villalba y Alcides Oviedo, dos de sus líderes detenidos por un secuestro. Además pidieron que la familia reparta provisiones a 40 comunidades de la región en un plazo máximo de ocho días. Por otro lado requirieron que la zona de la estancia del exvicepresidente, donde fue secuestrado, sea despejada para que puedan salir a conseguir los medicamentos que necesita Denis Sánchez. El hombre tiene 74 años y es insulino dependiente. Sobre Mendoza dijeron que sería liberado una vez que pudieran obtener los medicamentos.

En la tarjeta de memoria que entregó el grupo guerrillero había dos videos. En uno de ellos, además las instrucciones para liberar a los detenidos, detalló las comunidades que debían ser beneficiadas con la entrega de alimentos. En el segundo mostraron un comunicado que exigieron sea publicado íntegramente en menos de 24 horas. "En caso que no cumplan en ocho días, el caso quedará como cerrado y el retenido fusilado", advirtieron los secuestradores en su mensaje a la familia. Además en la bolsa entregada había una hoja con la firma de Denis Sánchez, y otra con las huellas dactilares de Mendoza. La hija del exmandatario dijo que no eran pruebas de vida suficiente. "Pido encarecidamente una prueba de vida de mi padre ya que nosotros vamos hacer hasta lo imposible para poder cumplir con el requerimiento y tenerlo de vuelta sano y salvo", señaló la mujer.

El ministro del Interior Euclides Acevedo emitió un comunicado informando que siguen los operativos para encontrar a los secuestrados. “Un trabajo coordinado entre las Fuerta de Tarea Conjunta (FTC) y el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación. En comunicación frecuente con los familiares”, Informó el ministro. El viernes había llegado al país un grupo de expertos militares colombianos tras el pedido de ayuda realizado por Abdo Benítez.

Los indígenas: víctimas del fuego cruzado

El jueves el exvicepresidente había sido secuestrado en su estancia del departamento de Concepción. En el lugar habían encontrado folletos de una  brigada indígena del EPP. Esta es una organizaciones guerrillera marxista leninista que apareció por primera vez en 2008. A lo largo de su historia llevó adelante varios secuestros y atentados. Junto a Denis Sánchez estaba su empleado de 21 años que integra la comunidad indígena Pai Tavytera, ubicada en el departamento de Amambay, vecino de Concepción.

La madre de Adelio Mendoza pidió que lo liberen sino ingresarían al monte a buscarlo. “Hasta este mediodía vamos a esperar y si no le liberan vamos a entrar al monte. Si me están viendo, quiero que liberen a mi hijo”, dijo Juana Benítez. El secretario Ejecutivo de CODEHUPY dijo que estas declaraciones de la familia muestran que las organizaciones guerrilleras no representan a la comunidad indígena. “Los Pai Tavytera son un pueblo de origen guaraní muy organizado. Cuando se conoció la noticia del secuestro llevada a cabo por esta presunta brigada indígena del EPP rechazaron de lleno que se los ligue a esta situación”, sostuvo Ayala. El activista dijo que la comunidad difícilmente acepte la ayuda de los guerrilleros. “En esa zona del país y especialmente en Amambay funcionan grupos armados ligados al narco que llenaron de violencia la región. Las víctimas son las comunidades indígenas. Por otro lado la repuesta militarizada que da el Estado, utilizando fuerzas armadas para seguridad interna, ya demostró que además de ser inconstitucional no resuelve el problema”, dijo Ayala.