En la reunión que mantuvieron ayer a la tarde con funcionarios del gobierno provincial y municipal, previa a los anuncios que prorrogaron las restricciones, los referentes de las actividades comerciales más afectadas por la pandemia, como gastronomía, hotelería, gimnasios y canchas de fútbol 5, entre otras, fueron notificados que tenían que esperar una semana más para poder abrir.
"Salimos con sabor a poco", dijo Carlos Mellano, de la Cámara Hotelero Gastronómica. "Sin trabajar no podemos estar, por eso planteamos un subsidio y el ATP provincial (en relación a la asistencia que da Nación a las empresas) para los trabajadores, además de la condonación de parte de la deuda de las facturas de la EPE, entre otros temas", agregó el referente de la cámara que nuclea a bares, restaurantes y hoteles.
Los comerciantes, que previamente realizaron una caravana con bocinazos a modo de protesta que pasó por la Municipalidad hasta llegar a la sede de Gobernación, fueron recibidos por los ministros Esteban Borgonovo (Gobierno) y Roberto Sukerman (Trabajo).
También participó del encuentro el secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana. Durante el cónclave, pidieron a los funcionarios que les permitiesen abrir los locales, y además plantearon necesidad de que entre en vigencia la emergencia económica. “Hay que entender que esta situación es extrema, pero nosotros necesitamos soluciones”, indicó Mellano a Radio 2. El próximo lunes, las partes volverán a reunirse para definir un nuevo protocolo con vistas a que el viernes próximo, si el escenario muestra señales de mejora, puedan comenzar parcialmente a retomar actividades que hoy no pueden ejercer.
Durante toda la semana, gastronómicos y gimnasios, dos rubros que habían logrado abrir pero fueron restringidos o cerrados desde el 5 de septiembre pasado, amenazaron con abrir con o sin autorización. A ellos se sumaron los complejos de fútbol 5. Finalmente el diálogo primó y todo se postergó por una semana.
