Desde Santa Fe
Una multitud se convocó ayer frente a la Casa Gris para reclamarle al gobernador Miguel Lifschitz que escuche a los maestros. "Somos trabajadores en la calle que esperamos con dignidad una propuesta salarial que valga la pena", le pidieron. La protesta desbordó de bronca por el tono imperativo de la ministra de Educación Claudia Balagué que amenazó con descontar los días de huelga ûel de ayer y el de hoy‑ y extender el ciclo lectivo hasta Navidad. "Si el gobierno provincial no reconoce la pérdida salarial de 2016 y la escalada inflacionaria de 2017 eso tiene un solo nombre, se llama ajuste", advirtió la secretaria general de Ctera y Amsafé, que cerró el acto. Balagué también ha dicho que volverá a negociar con los gremios docentes posiblemente este viernes.
Una inmensa columna de casi seis cuadras se movilizó por el microcentro. El punto de encuentro era la plaza del Soldado y cuando los primeros de la marcha llegaron a la plaza de Mayo, los últimos estaban a cuatro cuadras. Los canticos eran réplicas a Balagué, a quien le recordaron que la paritaria no tiene techo. "Con los maestros no van a poder", le cantaron.
Alesso cerró la lista de oradores, mientras desde un dron se filmaba a la marcha desde el aire. Las nubes ayudaron bastante para aglutinar a los manifestantes y apagar el sol que caía a plomo. "Son meses de lucha", dijo la líder de Amsafé. "Pero parece que vamos a tener que hacer una marcha de antorchas para los gobiernos escuchen a los maestros", ironizó. "¿Hasta cuando vamos a aguantar las agresiones? Lo que quieren es que retrocedamos ante el ajuste. Porque esto se llama así, ajuste. Y si el gobierno provincial no quiere reconocer la pérdida salarial del año pasado y actualizar la pauta de inflación de 2017, eso tiene un solo nombre, es ajuste", planteó.
Los comentarios de Balagué acerca de la interna de Amsafé, también tuvieron su retruque. "Las movilizaciones, los debates en las escuelas, muestran que los maestros decidimos con autonomía. Ningún partido político va a venir a decirnos a los docentes cómo vamos a llevar nuestro plan de lucha. Que eso quede claro", afirmó Alesso.
Pero "no somos neutrales: defendemos la educación pública y las paritarias. En los años 90, también quisieron hacernos retroceder y no pudieron". Hoy "nuestro objetivo es que no haya provincias de primera, segunda, tercer y cuarta", por eso "peleamos por presupuesto, ley de financiamiento y la paritaria nacional".
La secretaria general de Sadop, Patricia Mounier, coincidió que el problema es el "presupuesto", pero también "ideológico". "Nosotros luchamos por un modelo de país y de un proyecto de educación que el gobierno nacional y gobierno provincial no tienen y ese proyecto lo tenemos que defender en la calle".
Allí señaló la esquina del Arzobispado de Santa Fe, donde atiende el arzobispo Juan José Arancedo: "En ese edificio ostentoso está la usina donde planifican el apriete el compañeros, de ahí salen las amenazas. ¡Compañeros, ni voluntarios ni apóstoles! Somos trabajadores en la calle que esperamos con dignidad una propuesta salarial que valga la pena. Esperamos que el gobernador y la ministra escuchen a todos los docentes que estamos en la calle para reclamar lo que nos corresponde".
