Los policías Alejandro Bustos y Leonel Mendoza fueron condenados este mediodía a la pena de perpetua por el doble crimen de David Campos y Emanuel Medina, tras una persecución del 23 de junio de 2017. En el mismo fallo unánime, otros 17 agentes fueron condenados a penas de entre 1 y 7 años de presión. Sobre dos de ellos se ordenó la inmediata detención, mientras que los dos principales acusados ya estaban presos. "Se hizo justicia. Que no maten más a los pibes", exigió Germán, hermano de David Campos.
"Yo sabía, yo sabía, que a los pibes los mató la policía", cantaron decenas de personas y organizaciones como la Multisectorial contra la Violencia Institucional, junto a organismos de derechos humanos que acompañaron a las familias de las víctimas.
"Estos 19 no patrullan nunca más", gritó Germán cuando bajó llorando del Centro de Justicia Penal donde el juez Román Lanzón leyó el veredicto resuelto con sus pares María Chiabrera y Gonzalo López Quintana.
Para los abogados querellantes Santiago Bereciartua y Federico Garat el fallo "es un claro mensaje a las fuerzas de seguridad".
El fiscal Adrian Spelta manifestó "satisfacción" y dijo que se logró "por el trabajo de todo un equipo".
David Campos tenía 28 años y era trabajador metalúrgico; Emanuel Medina, de 32, era comerciante y padre de familia.
