Más de 50 grados de calor azotan a Coronel Juan Solá (más conocido como Morillo) y distintos municipios de Rivadavia Banda Norte (en el departamento Rivadavia) durante las épocas estivales. La combinación de esas temperaturas con al menos 20 cortes de luz en lo que va de noviembre y la consecuente falta de agua, llevó a los ciudadanos a reunirse el lunes último en una asamblea. Allí decidieron protestar con tomas de la oficina de Edesa durante el horario comercial. 

Ayer el presidente del Ente Regulador de Servicios Públicos (ENRESP), Carlos Saravia, estuvo en Morillo. Afirmó que ya se iniciaron los sumarios contra la empresa de energía y contra Aguas del Norte, y que habrá equipos que se harán cargo de los reclamos por la afectación de electrodomésticos que quedaron sin funcionar por las constantes bajas de tensión. Como “souvenirs”, los vecinos le dejaron a Saravia botellas de agua turbia que sale de las canillas del pueblo.

“Hay gente que en menos de un año tuvo que cambiar la heladera en dos ocasiones”, contó a Salta/12 Esteban Aguilar, uno de los vecinos que decidió encadenarse en las oficinas de la empresa mientras duran las protestas. Los cortes de luz son continuos y “en algunos casos superan las 15 horas en Morillo, y en Los Blancos (pueblo ubicado a 10 kilómetros), llegan a estar hasta 20 horas sin luz”, en un solo día, afirmó. La última semana de octubre fue un preludio de la situación actual, dado que en 30 días de ese mes “estuvimos 40 horas sin luz”, contó el vecino.

Solo si hay luz, hay agua. Y es que si bien Aguas del Norte contaba con generadores de emergencia en caso de cortes de energía, hace un año y medio se echaron a perder “y nunca más los arreglaron”, manifestó el vecino.

A la irregularidad en la prestación de estos dos servicios esenciales se suma también la falta de conectividad. Pues hasta las antenas de telefonía dejan de funcionar y los pobladores quedan desconectados. Aguilar afirmó que una de las empresas telefónicas ya se comprometió a disponer de baterías para que las antenas puedan funcionar pese a la falta de energía, al menos por unas horas.

Los vecinos decidieron que hasta el viernes continuarán con las medidas y piden la presencia de los responsables de ambas empresas, dado que los reclamos se vienen gestionando desde hace un año. En caso de que hasta el viernes las soluciones concretas sigan sin aparecer, “vamos a ir a Salta Capital a tomar las oficinas”, advirtió el vocero.

Reclamos con requisitos inaccesibles

Aguilar se quejó del procedimiento que, según dijo, estableció Edesa para reconocer la afectación de los electrodomésticos. “Casi que te termina pidiendo el ADN”, sostuvo con ironía. La situación fue aceptada por Saravia, quien confirmó que se solicitará que se simplifiquen los trámites para las denuncias. Además, se prevé contar con un equipo que pueda encargarse de evaluar cada uno de los resarcimientos solicitados a raíz de la irregular prestación del servicio eléctrico.

El ENRESP ya emitió una orden regulatoria con el fin de que Edesa minimice la frecuencia y duración de los cortes de servicio que afectan las poblaciones ubicadas sobre la ruta nacional N° 81 desde Senda Hachada hasta Capitán Pagé. La orden incluye proveer de manera inmediata los recursos humanos y materiales para atender de forma eficaz, las 24 horas, la operación y mantenimiento de las instalaciones de la empresa. La orden emitida el lunes indica que desde ese día y en los próximos 7 días “el plan de acción debe estar operativo”. Uno de los problemas es la falta de recursos humanos. Cada una de las empresas cuenta con dos operarios para cubrir cuatro municipios en un radio de 12 mil kilómetros cuadrados.

Saravia también comprometió la instalación de una delegación del ENRESP con una persona nombrada por el municipio de Morillo, en acuerdo con los concejales. La asamblea de vecinos podrá elegir a una persona ad honorem que controle y fiscalice los trabajos que se realicen desde esa oficina.

Respecto al reconocimiento y resarcimiento por rotura de electrodomésticos, Saravia sostuvo que existen “algunos requisitos que a veces son imposibles de cumplir”, como la certificación de técnicos, por lo que entendió se deben simplificar esas condiciones. También se solicitó mayor inversión dado que, según los vecinos, la infraestructura que hay en el pueblo es antigua. Añadió que los cortes en la zona superan en hasta cuatro veces el promedio de cortes en la provincia. “De los 20 cortes que hubo en noviembre 8 son culpa de Transnoa”, afirmó al apuntar a la empresa regulada por el Ente Nacional Regulador de Electricidad (ENRE).

Los cortes se consideran “tolerables” si son hasta 3 minutos. En aquellos donde se excede ese tiempo corresponde iniciar un sumario. “Hay que excluir los que son responsabilidad de otra empresa y situaciones de fuerza mayor”, explicó el funcionario al sostener que de todas maneras se evalúan posibles sanciones una vez que se certifiquen los incumplimientos.