¿Tiene algún proyecto cinematográfico?

–Es muy difícil hacer cine en Grecia porque las novelas negras necesitan un presupuesto muy alto. No se pueden hacer en un estudio cerrado; hay que cambiar de una locación a otra y esto cuesta mucho dinero. Hay extranjeros interesados en hacer una película con Kostas Jaritos, pero todavía estamos en conversaciones. Hay tres o cuatro candidatos, pero no se ha tomado ninguna decisión todavía. 

–¿Usted intervendría en el guion o simplemente vendería los derechos?

–Vendo los derechos. Escribir los guiones de mis novelas sería un error. Hay que encontrar a un guionista que lo haga. Hay dos series de televisión con las primeras dos novelas y en ambos casos el productor me convocó para que escribiera el guión. Y yo me rehusé. Hay una enorme diferencia entre un guion y una novela. Las partes débiles de una novela pueden ser las partes fuertes del guion. Y viceversa. Si intervengo, voy a seguir la novela, por lo tanto sería un mal guion y no quiero hacerlo. Además, me pone más contento escribir una novela nueva.