A partir de hoy miércoles, se encuentra disponible en Netflix el documental Rompan todo, que aborda una perspectiva fresca de la historia del rock latinoamericano. El proyecto surgió hace dos años de la mano del argentino Nicolás Entel, de cuya trayectoria destaca el documental Pecados de mi padre (basado en la vida de Pablo Escobar, desde el punto de vista del hijo del narco). A diferencia de aquella experiencia, en la que fungió como director y guionista, en esta aventura audiovisual fue el productor ejecutivo y guionista principal. Además, contó con la complicidad del videasta Picky Talarico, en el rol de director, y del músico Gustavo Santaolalla, quien se sumó en calidad de productor ejecutivo y también de entrevistado. A lo largo de seis episodios (Página/12 tuvo acceso a los tres primeros), un centenar de artista esenciales ofrecen su versión del desarrollo del rock en América latina, entre fines de la década del '50 y comienzos de este nuevo milenio. “Filmamos en ocho países”, agrega su creador. “Sumale otro más, si tomamos en cuenta que a los músicos venezolanos los entrevistamos en otros lugares”.

Rompan todo: la historia del rock en América latina (así es su nombre entero) tiene la osadía de aparecer en una época dominada por la música urbana. “Por todos los años que uno viene cargando, he visto pasar al rock por curvas ascendentes y descendentes debido a diferentes motivos”, explica Santaolalla. “El rock es una actitud y es algo que permea muchas cosas. Incluso la música urbana, que tiene en Residente a un referente que involucra al rock en lo que hace, lo mismo que Wos. Estamos en un momento medio de hibernación. Sin embargo, estoy convencido de que existe un futuro para el rock. Siempre habrá una música que los jóvenes elegirán como su folklore, para expresar su insatisfacción y manifestar una visión diferente a la que intentan imponer los medios de comunicación. El rock es eso. He visto tantas veces titulares que dicen que el rock ha muerto y... no lo creo. Por ejemplo, en la pandemia hubo récord de ventas de guitarras eléctricas. Esto fue aún más notable entre el público femenino”. Y Talarico spoilea: “El final de la serie habla sobre el futuro del rock. Es un momento emotivo”.

Apenas se dieron a conocer el póster del documental y el trailer, las redes sociales reflejaron el descontento de público porque, a pesar de que el título de esta producción invoca el gran hit del grupo uruguayo Los Shakers y su subtítulo abarca a toda la región, artísticamente se concentra en la Argentina y México. “No sólo reaccionó el público sino que también recibimos varios llamados de músicos”, reconoce Talarico. “Todos tienen algo para decir sobre el póster y el trailer. Y les dije lo mismo: no confundamos el producto en sí con las herramientas de marketing. Tanto Gustavo como Nico y yo nos hacemos cien por cien cargo del documental. El marketing nos excede. Entiendo la frustración, pero las razones por las que Netflix decidió poner un orden u otro tiene que ver con la venta”. Soda Stereo, Café Tacvba, Charly García, Molotov, Fito Páez, los Redondos, Maná, Andrés Calamaro, los Cadillacs, Zoé, Fobia, Spinetta y la chilena Monlaferte (rompiendo con la dialéctica argentina y mexicana) comandan la promoción. Aunque no todos son protagonistas.

“No te imaginás las veces que luché para no tener un papel protagónico en el documental”, revela Santaolalla acerca de una realización que promocionalmente también puso sus fichas en Aterciopelados, Los Prisioneros, El Tri, los Kuryaki, Julieta Venegas, Juanes y Los Tres. “Aparte de las razones del marketing, la promoción refleja una verdad: los dos polos más fuertes del rock en América latina son México y la Argentina. Y te lo dicen los mismos músicos, más allá de que tratamos de cubrir a la mayoría de los grupos representativos de todos los países. Siempre va a haber gente exigente que va criticarte, y sabíamos que iban a saltar los que iban a reclamar la ausencia de un grupo o del otro. La cuestión es abrir una puerta y contar una historia en yuxtaposición a la realidad sociopolítica que se vivía en cada momento en nuestros países. Después de que vean la serie, seguramente habrá más críticas. Por más que fueron entrevistados 100 artistas, hay muy poquito de cada uno de ellos. Por supuesto que no es perfecto. Es imposible contar todo. Pero creo que se ha logrado algo bastante interesante”.

En tanto que algunos historiadores afirman que el grupo cubano Los Llopis fue el primero en grabar rock en español, en 1958, Perú acredita que la primera canción original fue “Demolición”, de Los Saicos, single lanzado en 1965. La Argentina defiende su tradición de pionera con “Rebelde”, de Los Beatniks, publicada en 1966. Sin embargo, la teoría de Rompan todo es más inclusiva. “Nosotros ponemos el origen del rock en Ritchie Valens. Si bien nació en Estados Unidos, era de origen mexicano, tomó una canción tradicional como ‘La bamba, y la puso al ritmo del rock”, explica el director argentino. “Siempre decimos que si no se hubiera muerto en ese accidente, el rock en Latinoamérica se hubiera adelantado diez años”. De lo que no hay ninguna duda es sobre el impacto de los Teen Tops en todos los países de habla hispana. “No sólo tomaron el rock sino que lo tradujeron al slang mexicano. En una entrevista fascinante que tuvimos con Santiago Auserón, dice que una de las influencias de Radio Futura fueron ellos. España está a metros de Inglaterra y su influencia terminó siendo mexicana”.

No es azaroso que haya artistas españoles en esta serie de Netflix, donde Manuel Buscalia estuvo al frente de la producción periodística, con la consultoría del periodista argentino Claudio Kleiman y de su colega mexicano Enrique Blanc. “Hay algo que generó España que es fundamental en la historia del rock mexicano”, advierte Talarico. “A partir de lo que pasa en Avándaro, el Woodstock de México, el gobierno se sintió amenazado y el rock pasó a la clandestinidad. En los 80, un programa de radio comenzó a poner a Radio Futura, Los Toreros Muertos, Nacha Pop, Mecano y Hombres G. Incluyeron a artistas argentinos como Miguel Mateos y Soda Stereo, y alguien dijo: ‘Si esto funciona y no nos dicen nada, busquemos qué hay localmente’. Así aparecieron Fobia, Neón, Caifanes, y surgió la etiqueta ‘Rock en tu idioma’. Era imposible contar esto sin hablar con los españoles. Los Tacvba dicen que su mayor influencia fue Radio Futra y Auserón se sintió honrado porque es fan de ellos. Ese cruce de continentes es lo que más me gusta del documental”.

Uno de los aportes de este relato acerca de la evolución del rock en la América latina hispanoparlante, que tiene entre sus invitados a David Byrne, es el peso de la mujer durante sus diferentes procesos. “En el período que establecimos en el documental, el rock ha sido un mundo dominado principalmente por los hombres”, se lamenta quien realizó videos para Gustavo Cerati, Juanes, Julieta Venegas y Julio Iglesias. “Pero como hubo grandes mujeres en el rock, hicimos todo lo posible por encontrarlas. Nos encanta haber podido entrevistar en México a Julissa y si bien no pudimos entrevistar a Gabriela (precursoras de las mujeres en el rock argentino) , nos dio su bendición. Lo que sí hicimos fue entrevistar a todas las mujeres que pudimos. Juan Campodónico dice que el futuro del rock es mujer y Juana Molina lo afirma”. Mientras Santaolalla resalta que “contaron la historia del continente desde el punto de vista del rock”, Entel concluye: “Estoy muy orgulloso de cómo sintetizamos una historia del rock en español, privilegiando una versión regional y el diálogo creativo entre los diferentes países”.