El Gobierno de la Ciudad convocó a una reunión este viernes a los 17 sindicatos docentes porteños para analizar los términos del regreso a las clases presenciales que, según aseguran desde el Ministerio de Educación que conduce Soledad Acuña, "será sí o sí el 17 de febrero". Las secretarias generales de UTE, Angélica Graciano, y de Ademys, Mariana Scayola, descubrieron que la Ciudad en realidad había convocado a dos reuniones distintas, argumentando "cuestiones sanitarias" para separar a los sindicatos. "Exigimos que haya una única reunión con todos los sindicatos y denunciamos que el gobierno porteño está haciendo una maniobra para dividir, en particular, a los dos sindicatos mayoritarios que públicamente se han manifestado contra la política del Gobierno", aseguró Mariana Scayola en diálogo con PáginaI12

Desde la cartera que conduce Acuña aseguraron a este diario que "la reunión del viernes tiene que ver con un proceso participativo que estamos llevando a cabo desde el ministerio para charlar sobre lo que dejó el 2020, las cuestiones a mejorar en el 2021, los miedos y las sensaciones". De todas formas, rápidamente puntualizaron que "la vuelta a clases el 17 de febrero ya es una desición tomada", y que "la apuesta nuestra es que, además, la vuelta sea con el 100 por ciento de la matrícula". La primera reunión fue convocada a las 10.30 en la sede del ministerio, en el barrio 31 de Retiro, y la segunda, con los sindicatos restantes, sería por la tarde.

"Si tomamos como experiencia lo que sucedió en 2020, podemos ver que lo que viene haciendo el Gobierno de la Ciudad en este tipo de reuniones es a título meramente informativo y no da lugar a los reclamos que venimos planteando", denunció Scayola. "Todo lo que reclamamos durante el año pasado nunca fue tenido en cuenta. Por eso no tenemos mucha expectativa de que en esta reunión sí se vayan a contemplar. De cualquier manera, vamos a llevar nuestra posición sobre la presencialidad", detalló. La docente explicó que desde su sindicato consideran que "el Gobierno de la Ciudad tiene que garantizar las condiciones para una eventual presencialidad, en principio, con reformas en la infraestructura de las escuelas, ya que las instituciones no están preparadas para una vuelta tal como la están planteando". 

"Siguen diciendo que se arranca y que no pasa nada, con una posición totalmente negacionista de la pandemia. Ellos plantean que los chicos y maestros tenemos que convivir con el virus y después ver qué pasa. Nosotros, en cambio, entendemos que eso pone en riesgo la salud de los docentes, de las familias y que incluso potencia un posible rebrote de casos", refelxionó la secretaria general de Ademys.

Desde la cartera porteña indicaron que están llevando a cabo "un proceso participativo" para la vuelta a las aulas y que, en esa línea, ya se reunieron "con especialistas y distintas ONG, como Unicef, Ineco, Argentinos por la Educación. Ahora nos juntaremos con los sindicatos y a lo largo de de enero convocaremos a padres y alumnos", adelantaron. "Ellos --agregaron, en referencia a los sindicatos-- desde hace tiempo vienen reclamando diálogo. Bueno, acá se abre", resaltaron. Sin embargo, las fuentes del gobierno porteño aclararon que "tal como dijo Soledad (Acuña), con los sindicatos se discuten condiciones laborales y paritarias, pero las decisiones pedagógicas y el inicio del ciclo lectivo lo define el ministerio".

La titular de UTE-Ctera, Angélica Graciano, consideró que "es claro que la idea del Gobierno de la Ciudad es debilitar la educación pública mediante distintas estrategias de marketing". "No tenemos ningún indicio de que se vaya a discutir algo sobre nuestras condiciones de trabajo, porque las pocas reuniones que hubo fueron a título informativo. Próximamente esperamos que convoquen a una mesa salarial y de condiciones de trabajo", indicó. La dirigente de UTE también denunció que por parte de la cartera de Acuña "no hay ningún planteo serio ni responsable de planificación".

"Estamos hablando de espacios que no tienen ventilación, de grupos de 20 y 30 alumnos y de escuelas que tienen un enorme recorte del personal de limpieza", resaltó Scayola. Luego, puntualizó que otro de los conflictos a tener en cuenta es el salarial: "Venimos de perder un 15 por ciento y los salarios están muy devaluados. A todo eso hay que sumarle la crisis económica por la pandemia. Es muy difícil pensar en arrancar el 17". "Nosotros volvemos el 8 y realizaremos asambleas, pero el panorama es muy complejo", dijo.

Sobre la vacunación de los docentes, desde el Ministerio de Educación porteño afirmaron que los maestros serán vacunados "a medida que lleguen las dosis, pero siempre se dijo que la vacunación no era un requisito para volver a las aulas". Scayola, contó que "en la experiencia de las burbujas, a las que fueron muy pocos chicos, hubo veinte docentes contagiados. Ahora, en la escuela de verano hay al menos 25". "Sin vacuna y con el pico de casos que está habiendo, es muy difícil pensar que en un mes podamos arrancar las clases con normalidad", concluyó.