Haciendo uso de su posibilidad de declarar como acusado sin que le sea obligatorio decir la verdad, el abogado Rubén Carrazzone sostuvo hoy en el juicio que le llevan por el femicidio de su esposa -Stella Maris Sequeira- que es un "disparate" que lo acusen de haber ejercido violencia de género hacia ella y aseguró que es víctima de una "persecución maniática" por parte de la querella. 

En su ampliación de la indagatoria que había comenzado el miércoles de la semana pasada ante el Tribunal Oral Federal 2 de La Plata, el abogado negó haber mantenido una discusión con su esposa la tarde previa a su desaparición y dijo que existieron testigos que lo involucraron en el hecho porque la abogada querellante "les metió miedo". "Yo no estoy acá por ser víctima de ninguna confabulación armónica de nadie, el mundo no está en contra mío, muy por el contrario. Estoy aquí por el mal procedimiento de algunos funcionarios públicos y por la persecución maniática de la doctora (Raquel) Hermida Leyenda", dijo el acusado en referencia a la abogada que representa a los familiares de Sequeira.

Vestido con un traje negro y durante más de cuatro horas de indagatoria, en las que respondió preguntas de los jueces del tribunal y también del fiscal del juicio Rodolfo Marcelo Molina, Carrazzone (66) dijo que es un "disparate" que lo acusen de haber sido violento con su esposa, Stella Maris Sequeira, y narró algunos episodios en los que acusó de esa violencia a la hija de su mujer, Solange Ponzo, quien actúa como querellante en la causa y será la primera testigo del juicio, el miércoles próximo.

Tras aclarar que tanto el personal de la Policía Federal, como de la provincial, de Gendarmería y de todas las reparticiones técnicas trabajaron "en forma encomiable", el acusado culpó al fiscal que entonces instruyó la causa, Leonel Gómez Barbella, y al juez federal de Lomas de Zamora Alberto Santamarina de negarse a investigar otras pistas que podrían haber conducido a esclarecer lo ocurrido.

Tras la declaración de Carrazzone, el tribunal integrado por los jueces Alejandro Daniel Esmoris, Néstor Javier Jarazo y Fernando Canero, pasó a un cuarto intermedio hasta el miércoles próximo cuando comenzará a escuchar a los testigos.