Mientras miles de personas padecen la incertidumbre del día a día y la tristeza parece a veces invadirlo todo en contraposición hay quienes persisten en lo frívolo y lo superficial con absoluta indiferencia.

En efecto, la pulsión de muerte puede aparecer camuflada con los mandatos del consumismo y el vértigo. El capitalismo ofrece múltiples coartadas para potenciar las "maquinarias de la alegría" en el ímpetu consumista aún entre las ruinas.

Contraste brutal entre el despilfarro de una minoría y los múltiples padecimientos de la mayoría en diversas latitudes de la región. No es casual que parte de la élite emigre en tours hacia Miami en la búsqueda de playas y vacunas contra la covid.

El sistema tiene ofertas para todo. Promoción de hot sale en un país con casi el 50% de población empobrecida.

Contradicciones flagrantes de un sistema perverso donde las mercancías reinan por doquier y la vida humana y la de otras especies carece de valor.

Ecosistemas devastados para el paroxístico desarrollo de las fuerzas productivas.

Una vez más lo decimos: la lucha de clases no se suspende por pandemia.

Carlos A. Solero