Una hora y media es el tiempo que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, le dedicará a Mauricio Macri y a sus ministros en la primera comitiva oficial a la Casa Blanca. El encuentro, que incluye una reunión privada de quince minutos entre los dos mandatarios  y un almuerzo de trabajo con algunos ministros de ambos gobiernos, fue planteado desde el Gobierno como punto decisivo en la relación bilateral. Sin embargo, la prensa local ni registró el paso del presidente argentino por la agenda de Trump.

Las últimas menciones de Macri en los medios más populares de Estados Unidos hacen referencia a las declaraciones del reconocido actor de Hollywood Viggo Mortensen, quien llamó al Presidente y a sus ministros “fanfarrones neoliberales” tras la avanzada del Gobierno sobre el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa). Del paso de ayer del Presidente por Houston para inaugurar allí una fábrica de Techint -donde se harán los mismos tubos que en la planta de Campana, donde la empresa suspende personal y recorta salarios- no hay ni una sola cita.

El Washington Post sólo le dedicó una línea al Presidente en el calendario de actividades gubernamentales que se publica al estilo de agenda. Además de las declaraciones de Mortensen, el diario menciona la negativa de Trump de aceptar la importación de limones argentinos. 

Algo similar ocurre en los diarios The New York Times y USA Today donde la visita presidencial tampoco fue mencionada. En USA Today,  la última referencia a Macri data del día en que conversó telefónicamente por segunda vez con el presidente norteamericano luego de que trascendiera el rumor de que Trump había preguntado por los permisos que aún faltaban para la construcción de su torre en pleno centro porteño. El New York Times se ocupó por último vez de Macri con motivo de la reforma migratoria, al estilo Trump, que endureció las condiciones de permanencia en el país para los extranjeros.