Al menos nueve personas murieron en un tiroteo ocurrido este miércoles en un taller ferroviario de la ciudad de San José, estado de California, en otro caso de violencia derivado del uso de armas de fuego en EE.UU. Según informó el diario Los Angeles Times, el autor fue identificado como Samuel Cassidy y era un empleado de mantenimiento en la Autoridad del Transporte del Valle de Santa Clara (VTA por sus siglas en inglés). De acuerdo al matutino, Cassidy disparó contra sus compañeros de trabajo y falleció de una aparente herida de bala autoinfligida.

El hecho se produjo en el patio de maniobras que la Autoridad del Transporte del Valle de Santa Clara tiene en el centro de San José, donde almacena y lleva a cabo las tareas de mantenimiento de los vagones de trenes. Según informaron fuentes policiales, Cassidy prendió fuego a su propia casa antes de participar de una reunión sindical en su trabajo, donde comenzó a disparar. Las autoridades dijeron que el agresor trabajaba allí desde hacía ocho años. 

El vocero de la oficina del alguacil del condado de Santa Clara, Russell Davis, explicó que por el ataque hubo varios heridos, algunos de ellos en grave estado, y que la policía halló explosivos en el lugar

La administración Biden reaccionó a la noticia. "La Casa Blanca está supervisando la situación. Nuestros corazones están con las víctimas y sus familias", dijo la vocera de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, en una rueda de prensa.

"Todavía no tenemos todos los detalles. Pero lo que está claro, como ha dicho el presidente, es que sufrimos una epidemia de violencia armada en este país, tanto de tiroteos masivos como de actos de violencia armada todos los días que no llegan a las noticias nacionales", manifestó Jean-Pierre desde la Casa Blanca.

 Por eso, la funcionaria explicó que el presidente Joe Biden le pidió al Senado que apruebe varios proyectos de ley que ya han recibido el apoyo de la Cámara de Representantes, entre los que se incluye una iniciativa para establecer un control de los antecedentes penales en todas las compras de armamento, algo que actualmente depende de cada estado.