Desde Santa Fe

Alberto Fernández recibió ayer en la residencia presidencial a Omar Perotti en una reunión a solas, que renovó el diálogo franco entre ambos, que es “excelente”, según ratificaron después fuentes seguras de la Casa Gris. “Un encuentro de viejos amigos”. Los dos se conocen desde hace años, el gobernador fue el primero que apoyó la postulación del presidente en 2019, así que las últimas diferencias políticas quedaron en ese plano. En el mano a mano y luego en la caminata por la quinta, Perotti repasó la situación sanitaria de la provincia, el avance del plan de vacunación y le agradeció a Alberto “el trabajo del gobierno nacional”, tanto en la compra de vacunas como el apoyo a las tratativas de Santa Fe para adquirir un millón de dosis de CanSino, que el mandatario anunció la semana pasada. El gobernador confirmó también que el presidente no viene a Rosario el 20 de junio y participará desde Buenos Aires, como ocurrió en 2020. “El acto se hará con los cuidados que la hora requiere. No queremos propiciar cosas que debemos evitar. Es la forma más adecuada de rendir homenaje” a Manuel Belgrano, explicó.

La madurez política de la relación quedó a la vista en la foto de Olivos. Perotti es el primer mandatario que se reúne a solas con el presidente, quien tiene un trato frecuente con los gobernadores, pero en los últimos tiempos sólo por video conferencia. El encuentro de ayer que para algunos resultó sorpresivo, no lo es tanto. El presidente y el gobernador de Santa Fe tienen un vínculo directo, sin intermediarios, de mucha confianza, así que la convocatoria sólo requiere una llamada telefónica, que fue lo que sucedió.

Un ministro del gabinete de Perotti -que está al tanto de su agenda- dijo que en el diálogo con el presidente se analizó “la situación sanitaria de la provincia, el programa de vacunación y la modalidad del acto del 20 de junio”. Más tarde, otra fuente de la Casa Gris ratificó que hablaron sobre “la situación general de la pandemia en Santa Fe, los indicadores epidemiológicos en la provincia, el avance del plan vacunación, la asistencia de la Nación durante la pandemia y el acto del 20 de junio”. Y agregó un último punto, al que llamó: “Temas generales en la relación entre el gobierno nacional y la provincia”.

A pesar de las especulaciones y corrillos, la agenda no incluyó el calendario electoral ni la interna peronista. Incluso, fuentes del gabinete desmintieron versiones sobre un supuesto “malestar” en la Casa Rosada con Perotti por el lanzamiento de “Hacemos Santa Fe”, la línea del PJ que reconoce el liderazgo del gobernador y se asume como fundadora del Frente de Todos. “Son habladurías. Eso no es cierto”, dijeron ante una consulta de este diario.

Antes de su reunión en Olivos, Perotti ratificó en Santa Fe que su principal preocupación es la lucha contra la pandemia. “Necesitamos disminuir la cantidad de contagios en la provincia porque estamos en una meseta alta, que en los últimos días tiende a descender y esa es una buena señal”, dijo el mandatario. “El número de camas críticas ocupadas no mejoró en la medida que nos gustaría. Lo que sí bajó es la tensión en los trabajadores del sistema de salud, que sienten que si bien el número de camas es escaso no está la tensión de si quedan una o dos camas, como la que vivimos”, destacó.

“Otro indicador preocupante es que por primera vez la ciudad de Santa Fe tiene más casos que Rosario, que es un dato que habrá que observar en los próximos días. Se trabajó mucho y bien entre la provincia y los municipios para sumar centros de testeos para identificar y aislar a muchos santafesinos y santafesinas que ya eran positivos y que hoy estarían dando vueltas, contagiando". Todos aquellos que tengan síntomas se tienen que aislar, es el mejor aporte que pueden hacer en este tiempo”.

Acerca de las restricciones, Perotti valoró que una ampliación en los horarios para dar una señal al comercio y la autorización de actividades al aire libre hasta 10 personas. “Para recuperar todo lo que quisiéramos, por ejemplo que la vuelta a clases presenciales, necesitamos que estos números (de contagios) sigan bajando. Y que el porcentaje de camas críticas ocupadas deje de estar arriba del 90% y se acerque al 80% , que es lo que buscamos”, concluyó el gobernador.