Ayer obtuvo la media sanción en la Cámara de Diputados de Salta, el proyecto de ley que establece que no se podrá sacar madera de la provincia si primero no cuenta con algún tipo de industrialización, que tiene por principal objetivo reactivar la alicaída industria maderera, tal como lo sostiene el Ejecutivo provincial en el mensaje que acompañaba a la iniciativa.

El proyecto se aprobó por amplia mayoría, pero tuvo varias abstenciones, ya que, como señalaron legisladores de la oposición, persistían las mismas dudas que de tres semanas atrás cuando el oficialismo intentó tratarlo por primera vez, pero la falta de dictamen en la comisión de Ambiente motivó su postergación.

Ramón Villa, presidente de esa comisión pero que no pudo participar por problemas de conectividad de internet de la reunión matutina en la que se definió el dictamen, indicó que originalmente se había acordado llevar a funcionarios del Ejecutivo para trabajar todas las imprecisiones que tenía el proyecto, como, por ejemplo, los alcances de industrialización que debe tener la madera, o la especificación de cuales son las especies consideradas nativas.

El malestar de los diputados fue que ante los planteos sobre esas cuestiones, les indicaron que se resolverían en la posterior reglamentación de la ley, por eso es que Carlos Zapata advirtió que una ley “debe ser clara” y señaló que la reglamentación “es para volver la norma operativa, no para establecer cuestiones dispositivas que hagan al alcance de la ley". Además, dudó que una ley pueda generar trabajo, “eso se logra con una buena situación económica”, expresó.

También se puso el foco en la tala ilegal de madera, por la insuficiencia del Estado para realizar operativos, debido a que un deficiente control le quita efectividad a la ley. Además, el texto enviado por el gobierno establece dos años de gracia para quienes ya tengan autorizado un proceso de cambio de uso de suelo, por lo que el producto que se extraiga de esos desmontes podrá salir de la provincia sin el requisito de la industrialización.

Villa también se refirió a la necesidad de que la industrialización se haga en el lugar de donde se extrae la madera. “Rivadavia es el departamento más saqueado de la provincia, hay madera del ahí en todo el país, pero no tenemos ni un aserradero”. Y finalmente, señaló que “si por industrialización es hacer con la madera un rollo o tabla, como ya se está haciendo, esta ley entonces no cambia nada”.

Fueron cinco los diputados que pidieron que vuelva a comisión el proyecto, pero esa posibilidad fue rechazada por el oficialismo, tras lo cual llegaron los pedidos de abstención para votar, justificados en que coincidían con el espíritu de la ley.

Aprobada con 43 votos a favor y uno en contra, la iniciativa pasó al Senado, que seguramente la convertirá en ley.

Licencia por enfermedad de oncológicas de un hijo

También aprobaron de manera unánime un proyecto que otorga a los empleados del estado una licencia especial con goce de haberes por dos años, “para la asistencia y cuidado de hijos que padezcan enfermedades oncológicas crónicas y/o prolongadas graves que requiera la atención permanente y personal ".

Su autor, Javier Diez Villa, hizo hincapié en que “ya bastante tiene un padre con el desgaste de tener un hijo al que se le debe prestar asistencia por encontrarse gravemente enfermo, como para que también deba preocuparse en sostener su estabilidad laboral”.

La iniciativa también establece que el Estado Provincial garantizará el uso gratuito de los servicios de transporte público de pasajeros a las personas cubiertas por esta ley que concurran a establecimientos asistenciales, cualquiera sea el trayecto y el horario. Además especifica que el beneficio puede extenderse a un acompañante.

Sin Pfizer pero con vacunas

Otro proyecto que tuvo el apoyo de los legisladores fue uno de declaración, instando al gobierno provincial a que compre vacunas contra la covid-19, para que se puedan inocular en menores de 18 años que tengan factores de riesgo.

Originalmente la solicitud era para la adquisición de las Pfizer, tal como lo redactó Andrés Suriani, pero el texto en su paso por las comisiones, tuvo esa modificación. Lo particular del caso es que se aprobó en forma unánime y ningún legislador solicitó la palabra para abordar ese punto.

Difícilmente el gobierno provincial intente salir a comprar las vacunas, ya que las provisiones enviadas desde Nación para los mayores de 18 por el momento son suficientes. Y ayer se conoció que el gobierno encabezado por Alberto Fernández había llegado a un acuerdo para adquirir 20 millones de vacunas Pfizer, que se suman a las 3,5 millones de Moderna, que fueron donadas por el gobierno estadounidense.

El antecedente inmediato fue cuando en junio la Legislatura le dio autorización al gobierno para que disponga del presupuesto necesario para comprar vacunas, lo que terminó siendo descartado tanto por la provisión regular desde Nación, que envía más dosis de las que se llegan a inocular, como por las dificultades que encontraron los encargados de tratar de comparar vacunas.