Un hombre de 60 años enfrenta un pedido de pena a 30 años de prisión, acusado por abuso sexual contra su hija y su nieta, en la localidad de Tostado. H.A.G., como se lo identificó desde Fiscalía, también fue imputado por varios delitos de violencia de género en perjuicio de una mujer que fue su pareja. Los fiscales Héctor Aiello y Shirli Tomasso plantearon que “el acusado llevó a cabo su accionar delictivo en el marco de un contexto de violencia de género física, psicológica y económica que ejerció durante años en perjuicio de mujeres que integran su grupo familiar”. 

El tribunal de juicio está integrado por los jueces Juan Gabriel Peralta y Javier Bottero y el conjuez Miguel Ángel Frausin. La acusacioń fiscal indica que “en reiteradas oportunidades, el hombre abusó sexualmente de su hija y de una nieta que es menor de edad y tiene una discapacidad física y mental. Cometió los delitos en momentos en los que se quedó a solas con cada una de las víctimas”, y aclararon que “aunque las fechas de los ataques sexuales no pudieron ser determinadas, de la investigación surge que ocurrieron entre 2014 y 2018”. Para Aiello y Tomasso "se aprovechó de las situaciones de vulnerabilidad de familiares que estaban a su cargo y no tenían posibilidades de oponer resistencia. La gravedad del daño físico y psicológico causado a las víctimas y, especialmente, al desarrollo afectivo de la nieta del acusado”. 

Los representantes del MPA se refirieron también a otros hechos: “En diferentes ocasiones, el acusado amenazó de muerte a una mujer que había sido su pareja. Entre el lunes 16 y el martes 17 de julio de 2018 la amedrentó con 99 llamadas telefónicas”, señalaron. Además, narraron que “el hombre intimidó a otra mujer diciéndole que iba a quitarle la vida a raíz de que había instado a las otras víctimas a denunciar sus padecimientos”, y detallaron que “esta amenaza sucedió el miércoles 8 de agosto de 2018 en la vereda de una vivienda en la que la expareja, la hija y la nieta del acusado residían temporalmente”. 

Los fiscales contaron que “semanas antes, el acusado había utilizado un palo de escoba para golpear a su hija”. Y expusieron que “el lunes 30 de julio de 2018 infringió una restricción de acercamiento que había sido impuesta a principios de mes por un plazo de 120 días”. Según indicaron, “entró en un inmueble en el que estaban las víctimas, apagó las luces y dejó sobre una mesa un palo, un cuchillo, un machete y una horquilla”.

Abuso sexual con acceso carnal calificado (por el vínculo); abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual simple gravemente ultrajante; amenazas simples; lesiones leves dolosas calificadas (por el vínculo); y desobediencia a un mandato judicial, son las calificaciones penales.