Luego de haber recibido presiones públicas de los productores autoconvocados vinculados a Cambiemos, la Mesa de Enlace decidió que no convocará ni acompañar en el corto plazo un nuevo cese de comercialización, exigido por los ultras como un medio de protesta contra la demorada definición del Gobierno Nacional en torno a la apertura o no de las exportaciones de carne. 

La decisión se tomó en una reunión que tuvieron en la sede de Sociedad Rural los cuatro presidentes de las entidades (CRA, Coninagro, Sociedad Rural y la Federación Agraria) y se extendió a un convite posterior: una cena que mantuvieron esos dirigentes con exportadores de carne y empresarios del sector, para tomarle el pulso a la cuestión de fondo, con ánimo de llegar a buen puerto sin conflicto mediante. 

"Por varias cosas, hoy no es el momento", dijo a Página I12 Elbio Laucirica, titular de Coninagro, que reemplazó en el cargo a Carlos Iannizzotto, hoy candidato a diputado en Mendoza. "El resto de la sociedad tiene muchos problemas, además de lo que le pueda pasar al campo. Además, estamos iniciando un ciclo político, y cualquier cosa que hagamos puede ser malinterpretado. Es un momento para que los ciudadanos compartan con los candidatos y decidan su voto", dijo el dirigente rural. 

Vale decir que en esa reunión, de la participaron Nicolás Pino (SRA), Carlos Achettoni (FAA) y Jorge Chemes (CRA), se definió que antes de tomar cualquier decisión, se consultará a las bases para analizar a fondo cuál es la situación de otros sectores, como las economías regionales. "Porque si bien el Gobierno nos prometió que van a flexibilizar, las soluciones no aparecen. Tampoco nos han dicho que no, pero...", completó el jefe de la entidad que nuclea a las cooperativas. 

Toda la historia de un nuevo lock out se aceleró por un evento muy módico en convocatoria que se realizó el 9 de agosto en la localidad cordobesa de Bell Ville. Allí, unos 20 productores pidieron ir a otro paro, con un acto incluido similar al del 9 de julio en San Nicolás. Eso obligó a la Mesa de Enlace a sentarse a charlar el tema: es que en el fondo hay una disputa de poder y representación entre la Mesa de Enlace y los autoconvocados más radicalizados, indentificados políticamente con Cambiemos. Por eso, la Mesa se desmarcó, aún siendo un polo opositor al Gobierno. 

Esa interna no es menor y, hasta ahora, la Mesa de Enlace venía siendo arrastrada por los autoconvocados. En el acto del 9 de julio, de hecho, la entidad no convocó formalmente ni en lo institucional, pero debió asistir con sus cuatro entidades para no perder legitimidad ante sectores más radicalizados que militan la salida a las rutas. En este caso de la negativa actual, hasta la Sociedad Rural no estaba de acuerdo en agitar las aguas. Tenía algunos de los elementos para llegar a esa conclusión: en la última marcha, se pidió a la asistencia no llevar consignas políticas, y en los primeros minutos del encuentro, entró a caballa y enfundada en poncho y sombrero, la titular del PRO, Patricia Bullrich. "Hace un mes y media hubo una medida de fuerza y no llegamos a nada", se sinceró un dirigente de la entidad que conduce Pino. 

En la cena posterior a la decisión de no parar, se vieron las caras varios pesos pesados del rubro, para tratar de articular cuestiones y buscarle una salida negociada a la cuestión de la exportación de carnes. Estuvieron allí Mario Ravettino, del consorcio de carnes ABC; Hugo Borrell, Carlos Riusech y Alejandro Dubois, otros referentes del sector. Contaron que no obtuvieron respuesta del Gobierno, por lo cual decidieron sumar más frigoríficos para reclamar medidas urgentes contra el cese de comercialización.