En la sala de debates de la Cámara en lo Criminal Penal de Segunda Nominación de Catamarca, comenzarán a juzgar hoy al médico ecógrafo, Luis Alberto Villalobos, quien está acusado por 7 hechos de abuso sexual cometidos contra cuatro mujeres.

Frente a los jueces, el acusado deberá responder por ultrajes que cometió en el 2017 durante el ejercicio de su profesión en la Maternidad Provincial 25 de Mayo y en el Mini hospital de la localidad de Villa Dolores. Villalobos, quien mantiene prisión preventiva desde el 2019, llega imputado por dos hechos de "abuso sexual gravemente ultrajante"; dos hechos de "abuso sexual gravemente ultrajante en grado de tentativa", y tres hechos de "abuso sexual simple" en concurso real

La causa tuvo vaivenes y dilaciones y fue elevada a juicio recién en diciembre del año pasado. Así se pudo saber que las primeras tres denunciantes, que decidieron contar lo sucedido durante los primeros meses de 2017, no obtuvieron respuestas de la Justicia hasta que la cuarta víctima, quien tuvo la posibilidad de tener un abogado querellante, comenzó a luchar por justicia.

En medio, Villalobos, a quien tras la imputación se le otorgó prisión preventiva, fue dejado en libertad por el ex juez de Garantías Porfirio Acuña, luego de fijarle una caución de 150 mil pesos. Sin embargo, la decisión fue apelada por la abogada de las víctimas, Silvia Barrientos y aceptada, por lo que en diciembre de 2019 el médico volvió a la cárcel.

Catamarca/12, pudo hablar en su momento con una de las víctimas, quien confesó que desde el 16 de marzo de 2017, día en que sucedieron los ultrajes, el recuerdo sigue atormentándola.

La joven, quien necesitaba hacerse una ecografía intrauterina, relató que el abuso comenzó casi al instante, cuando le dijo que se quite la ropa y no le dio una bata. Incómoda en la camilla y sabiendo que se trataba de un procedimiento invasivo, ella no imaginó cuánto más podría serlo.

Fueron las ginecólogas de la Maternidad quienes le dijeron que denuncie lo que le había sucedido, porque no era un procedimiento normal.

“Esa misma tarde fui a denunciar. Relaté lo que estoy contando y ahí empezó mi calvario. Me hicieron protocolo de abuso y para eso debí volver a la Maternidad. Después empecé a estar mal, bajar de peso, llegue a tener anorexia nerviosa y al mes tuve mi primer intento de suicidio”, señaló la joven en su momento.

Había pasado un año y Villalobos, pese a las cuatro denuncias que tenía por hechos similares, no había sido imputado aún por el fiscal instructor. La joven, comprendió que necesitaba justicia luego de encontrárselo en una marcha denominada “Por las dos vidas”, en la que él militaba como médico objetor de conciencia contra la legalización del aborto. Verlo en esa posición fue para ella el detonante para otro intento de suicidio.

La imputación y posterior ingreso preventivo en el Penal fue un alivio, porque en ese momento sintió que sus llegados comenzaron a creerle. Ahora, espera que los jueces de la Cámara Penal puedan juzgarlo y condenarlo por los hechos sucedidos. 

“Estoy confiada en que los jueces por todos los fallos que están pasando en Catamarca, como el del sacerdote Gutiérrez, el intendente Aybar y el femicida Vera, que me hacen creer que se va a hacer justicia. Espero la pena máxima, porque a mí me destruyó la vida”, dijo.