“Amo a los no amados” dice Joel al principio de la película dedicada a él y a su hermano gemelo, el pintor Jerome Witkin. Y son las imágenes las que corroboran lo dicho con otra potencia, un lenguaje visual cargado de simbolismos y citas a la historia del arte. Una historia que marginó a ciertos cuerpos (los gordos, los enfermos, los desviados) y elevó a otros a la categoría de elegidos, celestiales. 

Witkin, “el David Lynch de la fotografía”, como lo llama la prensa intentando clasificarlo, tiene una historia tan compleja como sus imágenes: la de su genealogía como artista, que se labró en espejo con la de su hermano. El documental de Trisha Ziff intenta captar ese big bang de ambos como hombres que consagraron sus vidas a la creación (el 13 de septiembre, día en que SOY accedió a una entrevista con la directora, ellos cumplían 82 años) y es a través del relato de distintas mujeres que los conocen que puede comprenderse algo de la complejidad de esta hermandad, a veces enfrentada, a veces actuando en una danza silenciosa que se conmueve frente a los mismos horrores (la decrepitud, la muerte, la violencia y la belleza cuando se activan al mismo tiempo).

Es la hermana de los gemelos la que narra la infancia: ellos hacían todo juntos, uno empezaba una frase y el otro la terminaba, los vestían igual… Allá por los cincuenta en Brooklyn, el padre se fue y los tres se criaron con su madre y su abuela en una familia de clase trabajadora. Estaban todo el día en la calle. Es muy impresionante ver cómo cada uno da su testimonio desmintiendo un poco al otro. Joel dice que la pierna de su abuela había hecho una gangrena y que del olor que emanaba está hecho un recuerdo demasiado vivo como para ignorarlo y Sara, su hermana, afirma que esa gangrena nunca ocurrió. Ella cree que Joel exagera y Joel está tan compenetrado en su relato que no le importa nada lo que se diga de él o su historia. 

Pero algo de su entorno absorbió: fue su hermano gemelo Jerome el que empezó a dibujar y quiso estudiar arte. El estaba más perdido en la adolescencia hasta que decidió alistarse como fotógrafo del ejército, fue a la guerra de Vietnam en 1961 y ya volvió siendo otro. Estudió escultura en Cooper Union y obtuvo la maestría de Bellas Artes en la Universidad de Nuevo México. Jerome estudió en la Escuela de Pintura y Escultura de Showegan, en Berlín, es un pintor y profesor muy respetado pero con otra impronta que su gemelo: más clásico, más formal, más contenido en sus emociones. Vive en Siracuse con su esposa y hace décadas que lo representa la misma galería de Los Angeles.

El afiche de Witkin & Witkin


Las fotos de Joel, entre Mapplethorpe y Arbus

Las fotografías de Joel son puestas en escena complejas, con reminiscencias a Diane Arbus por los personajes elegidos (toda la galería de “monstruosidades” salidas del circo de la época) pero además una re elaboración de ciertas obras icónicas del arte occidental como Las meninas de Velázquez, en clave grotesca bajo la dirección de Joel. El trabajo de observación del cuerpo, vivo o muerto, le otorgó a Witkin la fama, con un nombre de la talla de Mapplethorpe y una cotización de altura (de hecho, su colector más fanática también da testimonio en la peli y confiesa que su hermana tapa las fotografías de Witkin cada vez que va a su casa porque la incomodan). Witkin es además famoso por trashear los negativos de sus obras y conseguir paletas, texturas y terminaciones únicas e irrepetibles.

Son célebres muchas de sus fotos (las dos cabezas de viejos besándose, la recreación de La balsa de la Medusa de Théodoro Géricault o el torso mutilado que descansa como una Venus de Milo pero mostrando las vísceras). Ese fanatismo por aquello que está corrido de la norma lo llevó a un trabajo minucioso con la actriz y performer mexicana Alejandra Bogue, más conocida como La Bogue, a quien fotografió a lo largo de 25 años. “Yo trabajaba como host de un lugar para artistas bohemios en 1990. Adolfo Pérez Butron me dijo que andaba un fotógrafo buscando una chica con mis características. Y yo pensé “pero que me paguen”. Yo pensaba que se pagaba millones de dólares un trabajo así, pero no: el hombre te pagaba con una foto. Entonces me dio 150 dólares. “Lamento mucho señor Witkin pero yo necesito llevar plata a mi casa” le dije. A él le dijeron “hay otras mas guapas” pero él dijo “no, quiero a ésta”, cuenta La Boche en “Tres veces Witkin", un docu breve que puede verse en YouTube, donde también hay imágenes de la muestra en el Museo de Cuatro Caminos, en el DF mexicano, donde converge la narración de la película de Trisha Ziff. 


Trisha Ziff y su obsesión por los Witkin

"Yo era amiga de Joel, lo fui durante años. No sabía que tenía un hermano gemelo, él no lo nombraba nunca. Un día fui a una exhibición de arte en Los Angeles y vi una obra de Jerome. Y eso disparó mi obsesión: me compré el cuadro. También tengo una foto de Joel en otra pared, y empecé a ver la relación entre las dos. Hasta que un dia alguien me dijo “Sí, Joel tiene un gemelo idéntico y es pintor” y desde entonces tuve la idea de hacer una pelicula con los dos. Mi fantasía estaba en el diálogo entre sus obras, las conversaciones entre sus obras en mi sala. Mucha gente que los conoce a ambos me decía "no va a ser posible, Joel no va a querer hablar con su hermano". Primero yo fui a Siracuse, en el estado de Nueva York, y le propuse a Jerome participar en una peli con su hermano, en el 2016. Era algo para hablar personalmente, no por correo. Y después le pregunté a Joel. Y dijo que sí. Y el gancho para los dos era una exhibición juntos en México" cuenta a SOY Trisha Ziff, que trabajó durante cinco años en el film.

¿Y qué dijo Joel? El es el más reticente a hablar con el hermano...

--Los dos aceptaron, pero después yo tuve el problema de buscar el museo para la exhibición (risas) que no era para nada simple porque las obras de Jerome son enormes y cuesta una fortuna trasladarlas. El Museo Cuatro Caminos me ayudó con el proyecto. Y también hay un libro. Entonces yo trabajé en las tres cosas: fui la curadora de la exhibición, hice la pelicula y también el libro. Para mí el libro influenció mucho a la peli, es casi un guión. Y mi idea para el libro era ese círculo donde ellos caminaban y las mujeres, porque sin todas las mujeres que los ayudaron a hacer su obra ellos no funcionan. Las esposas de los dos, la asistente de Joel, la colector, son todas personas claves para ellos. Yo soy directora mujer y feminista pero la mayoría de mis películas son sobre hombres grandes, hombres muy difíciles, complicados, y ¿por qué? bueno yo creo que por mi relación muy complicada con mi papá.

¿Cómo dialogaban esas obras en tu living?

--Pienso que los temas del arte de los dos tienen paralelos y ojalá eso se vea en la película. La historia de los dos, crecer en la misma casa, con su madre y su abuela… Al principio son muy similares y después se mueven en muy diferentes direcciones. Y ahora uno vive en la nieve, en el norte y el frío, y el otro en el desierto de Nuevo México, en el calor. Son completamente ying and yang. En su cumpleaños 75, yo fui con un cineasta a la fiesta, pero en el medio ellos se peleron y no se hablaron por uno o dos años. 

Una de las cosas más impactantes del documental es que ellos no se hablan nunca.

--Una de las mayores influencias de mi vida es Samuel Beckett. Cuando yo estaba en el colegio de arte en Londres me obsesioné con él, es crudo, pero este es mi pequeño homenaje. Por eso puse a los dos vestidos de negro, solo se les ve la cara… Ellos nunca hablan en la película, es cierto, solo interactúan cuando entran al museo, y en eso yo fui muy estricta: ninguno tuvo la posibilidad de entrar antes al espacio y vinieron vestidos de negro que fue lo que les pedí. Ese fue mi único momento de absolut control de la película (risas). Lo hice con cuatro cámaras en diferentes lugares del espacio. Quería ver qué hacían ellos, si caminaban juntos o separados, y lo que hacen finalmente es revelador de su modo de comunicarse. Cada pieza se relaciona con otra de ellos.

¿Es verdad que en una proyección de la película en la que estuvieron los dos te pasaste mirando a cada punta de la sala para ver qué caras ponían?

--Sí (risas). Hubo un festival de cine de Los Cabos que los invitó a los dos, y ellos se sentaron en diferentes partes de la sala. Yo estaba en el medio y ni miré la pelicula, solo los miraba a ellos. Estaba súper nerviosa. La película es muy honesta sobre la relación de los dos, ellos dijeron cosas más duras pero yo decidí no incluirlas. No es mi trabajo ensanchar la tensión entre ellos entonces fui cuidadosa. Los dos respetan la película.

¿Seguís siendo amiga de Joel?

--Sí. Ahora mismo él está teniendo muchos problemas con su memoria. La película le da una oportunidad para recordar quién es, para saber su historia. Imaginate que toda la gente que tiene Alzheimer o problemas con su memoria tiene la posibilidad de ver una peli sobre su vida. Los dos tienen problemas con la memoria y es lógico porque los dos tienen identico ADN.

Trisha Ziff: la directora inglesa vive en México y esta es cuarta película.

¿Los dos siguen creando?

--Jerome sí pero Joel no. Cuando yo fui a esta proyección, mi último viaje antes de la pandemia (en enero de 2020) él me dijo “esta es mi última obra”. Las imagenes de Joel son teatro, mucho más complicadas de construir que el arte de Jerome, que es él frente a la pintura.

Da la impresión que Joel tiene más recelo para comunicarse con su hermano pero aún estando alejados dialogan a través de sus obras. ¿Es así?

--Fueron a la misma escuela, usaban ropa idéntica. La separación de los dos es cuando Joel está en el ejército y Jerome no. Joel cuando regresa va a la misma escuela de arte. El arte de Joel se vende a precios muy altos y Jerome es profesor de la universidad por más de cuarenta años. Es la rivalidad entre los dos. Y la arrogancia de Joel. No es un carácter fácil, pero al mismo tiempo él tiene un corazón enorme. Es complejo: Joel tuvo exhibiciones en todo el mundo, galeristas, colectors, y Jerome tiene la misma galería de toda la vida en Los Angeles. Son hombres competitivos. 

Y los dos tienen un paralelo en sus vidas: la pérdida de alguien muy cercano y muy importante que además se ve en la película como un proceso doloroso, incluso con el testimonio de la viuda de Joel que finalmente muere...

--Ella estaba en un momento de mucha fragilidad. Ella tiene su voz en la película, era mi amiga. Ahora Joel vive con Cinthia, su primera esposa, que no quiso participar. La de los dos son tragedias en la vida. Joel perdió a su esposa, Jerome perdió a su único hijo. Esta es una película independiente pero, creo yo, muy importante, y cuando la critican o dicen "no tiene suficiente arte", yo digo "no es sobre arte, es sobre estos hermanos, que son varones grandes y complejos, con vidas apasionantes que han dejado, cada uno a su manera, un legado".

Jerome Witkin

Witkin & Witkin va a proyectarse este sábado 2 de octubre a las 16 y a las 18 horas y el sábado 9 en los mismos horarios en Fundación Proa