A cinco años de la muerte de Luz Villafañe, la Cámara Juvenil Penal de Catamarca comenzó a juzgar a T.U. por abusar sexualmente de la niña de 13 años la noche previa a que ella decidiera quitarse la vida. Jaqueline Quevedo, madre de la víctima, había denunciado también a la policía, médicos y psicólogos del Hospital de Niños por no darle contención, pero nunca fueron imputados.

En la sala de debates se escuchó el testimonio de 6 personas. El más relevante fue el la mamá de Luz, que fue quién escuchó de boca de su hija el nombre del adolescente que la ultrajó. Según narró, el 11 de noviembre de 2016 alrededor de las 13.30 dos adolescentes mayores que Luz la fueron a buscar a su casa y ella le dio permiso para salir. Había prometido volver a las 19, sin embargo, las horas pasaron y la niña no regresaba.

Cerca de las 10 de la noche uno de los hermanos mayores de Luz fue a la casa y preguntó si había vuelto su hermana, porque le dijeron que la habían visto "con una chica que se drogaba". Cuando le dijeron eso Jaqueline salió a buscarla a la calle. 

A las 23, y ante la incertidumbre de no saber dónde estaba su hija  fue a la Unidad Judicial N|6 a radicar la denuncia. Sin embargo, los policías que estaban en el lugar le dijeron que tenía que esperar 24 horas y que mientras tanto la busque su familia.

Las horas pasaron. Luz por su propios medios llegó a la vivienda alrededor de las 7 de la mañana, “parecía drogada y tenía muchas marcas en su cuerpo”, declaró la madre. Fue por eso que la llevó de inmediato al Hospital de Niños. Ahí una pediatra y una psicóloga la evaluaron y le dijeron que se vaya a su casa pese a que la madre les advirtió que la niña no podía mantenerse en pie. 

Jaqueline y su hija Luz

Fue mientras esperaban la atención médica que Luz le dijo a su madre “perdón, perdón yo no quería, él me obligó”. Ante las preguntas de su progenitora, confesó el nombre de T.U, de quien sólo se dan las siglas porque al momento del abuso sexual tenía 17 años.

Esa misma tarde Luz decidió quitarse la vida. La autopsia determinó la violación que era reciente y encontró sustancias estupefacientes en su cuerpo. Mientras Jaqueline intentaba enterrar a su hija, un video en donde se podía ver a “las amigas” con las que vieron a Luz  golpeándola comenzó a viralizarse. Ese video, que daba cuenta del estado de la criatura en el momento, se perdió.

La mujer, según contó su abogada Silvia Barrientos, “se quebró en mil momentos mientras revivía lo que había pasado”.

Tras sus palabras, hablaron las adolescentes que la golpearon y admitieron lo sucedido. También habló el dueño de la vivienda donde Luz fue invitada porque había una fiesta. En ese lugar Luz manifestó que fue abusada carnalmente por T.U.

Por último ofrecieron su testimonio conocidos de Luz quienes dieron cuenta que era una niña tranquila y “dulce”.

El debate continuará hoy con la presencia de más testigos. Según estimaron los letrados, podría extenderse hasta el 20 de octubre.

Femicidio del Estado

El caso de Luz trascendió las fronteras de la provincia por las nutridas marchas que acompañaron a su madre por las calles de Catamarca. Fue catalogado por quienes pedían justicia como un “femicidio del Estado”.

El argumento de las manifestantes y de la familia de la niña, es que si la policía la hubiera buscado, la médica la hubiera retenido y limpiado su cuerpo de las drogas que le hicieron ingerir, y la psicóloga la hubiera contenido en vez de explulsarla "por el estado en el que estaba" (drogada), la niña no hubiera podido tomar la decisión de quitarse la vida.

Por otra parte, repudiaron  a quienes demoraron la investigación y juzgaron a la madre aduciendo que Luz había sido abusada sexualmente por parte de su abuelo materno, quien sufre de demencia senil.