La situación judicial del jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, genera disidencias dentro de Cambiemos. El presidente Mauricio Macri consideró en una entrevista desde Dubai que “no le preocupa para nada” que se haya reabierto el viernes la investigación contra su amigo por supuestos cobros de coimas en el marco del Lava Jato, mientras que el presidente del bloque de senadores por la UCR, Ángel Rozas, opinó en Radio 10 todo lo contrario y consideró que si la denuncia tiene contundencia “corresponde que urgentemente se lo separe del cargo”.

Después de que “el arrepentido en la causa Odebrecht”, Leonardo Meirelles, confirmara el jueves que le pagó “coimas” al titular de la AFI por cuenta y orden de la empresa Odebrecht, la situación se complicó para Arribas, que había sido absuelto previamente por el juez Canicoba Corral. Un día después de las declaraciones de Meirelles, la Justicia resolvió retomar la investigación sobre las transferencias que habría recibido el empresario. Meirelles declaró el jueves que le hizo a Arribas diez giros por 850.000 dólares.

“La información que ha presentado Arribas está clara y creo que ya ha dicho todo el ministro (de Justicia, Germán) Garavano sobre qué está sucediendo con un sector de la Justicia", expresó el presidente hoy durante su gira por Asia y además cargó directamente contra el arrepentido: "La pregunta es quién es Meirelles. Esa es la pregunta". 

Rozas, por su lado, afirmó que "corresponde que urgentemente se lo separe del cargo” a Arribas si la denuncia es "contundente" y además remarcó que “hay que estar seguro” de que “haya pruebas fehacientes de alguna vinculación de lo que se denuncia”, en el marco de la megainvestigación brasilera por delitos de corrupción política.

“Si fuese probadamente cierto, más allá de que esos hechos se produjeron cuando no era funcionario público, el Gobierno debería pedirle la separación del cargo, ya que no puede tener a alguien involucrado en semejante maniobra”, destacó Rozas.