Tras la polémica selección del jurado, integrado por once personas blancas y un solo negro, que decidirá la culpabilidad o la inocencia de los tres hombres blancos acusados de perseguir y matar en febrero del 2020 al afroamericano Ahmaud Arbery, mientras practicaba deporte en la pequeña localidad de Brunswick (Georgia, EE.UU.), este viernes comenzó el juicio con los argumentos orales de las partes.

A pesar de que el juez de la Corte Superior, Timothy Walmsley, reconoció que "pareciera haber discriminación intencional" en la composición del jurado, Gregory McMichael, de 65 años, su hijo Travis, de 35, y su vecino William Bryan, de 52, serán juzgados en el estado sureño de Georgia, acusados del asesinato de Arbery.

Gregory McMichael, su hijo Travis y su vecino Bryan están imputados de asesinato y otros delitos después de perseguir a Arbery, de 25 años, y dispararle en febrero del año pasado.

Durante las dos semanas y media que duró la selección del jurado, los defensores de los tres hombres blancos objetaron a 11 de los 12 eventuales jurados negros, proceso que provocó acusaciones de discriminación racial.

"Después de ser perseguido, acorralado y baleado por ser un hombre negro en un vecindario blanco de Georgia, a Ahmaud Arbery se le niega nuevamente la justicia", denunció Ben Crump, abogado de derechos civiles.

En el condado de Glynn, donde se lleva a cabo el juicio, más del 26 por ciento de los 85.000 residentes son negros y alrededor del 69 por ciento son blancos, según datos de 2019 de la Oficina del Censo de Estados Unidos. 

Por su parte, la madre de Arbery, Wanda Cooper-Jones, le dijo a First Coast News que estaba "muy sorprendida" de que solo se hubiera seleccionado un jurado negro, y consideró que "eso fue devastador".

Los fiscales impugnaron la remoción de ocho de los posibles jurados negros, pero el juez determinó que los abogados defensores habían presentado razones válidas para su exclusión.

El caso 

El 23 de febrero de 2020, los McMichael persiguieron pertrechados con armas de fuego y a bordo de una furgoneta a Arbery, el joven de 25 años, mientras se entrenaba corriendo por un barrio de las afueras de Brunswick. El otro imputado, Bryan, se unió a la persecución y grabó con un móvil cómo Travis McMichael disparaba de cerca a la víctima, causándole la muerte.

Los tres afrontan los cargos de asesinato premeditado y de homicidio involuntario, así como el de agresión con agravantes y privación ilegal de la libertad.

Parte de la persecución quedó grabada en un vídeo de 36 segundos, cuya publicación meses más tarde del incidente generó una ola de protestas en Estados Unidos. 

La fiscal principal del estado, Linda Dunikoski, reprodujo ese vídeo al inicio de los argumentos orales de este caso.

Los abogados de la defensa sostienen que ninguno de los tres hombres cometió ningún delito, al argumentar que padre e hijo sospecharon que el afroamericano podía ser un ladrón, y que Travis McMichael disparó en defensa propia.

La defensa, por su parte, pidió que se declarara nulo el juicio porque consideró que la Fiscalía planteó "de manera inapropiada" cuestiones sobre las detenciones de los acusados, que se produjeron más de dos meses después del asesinato. Sin embargo, eljuez del caso desestimó la petición y decidió seguir adelante con el juicio.

Está previsto que el proceso termine el próximo 19 de noviembre, según la Oficina del Fiscal del distrito del condado de Glynn, aunque tampoco se descarta que se podría alargar más allá de esa fecha. 

Mientras tanto, los sospechosos continúan detenidos, después de que se les denegara la libertad bajo fianza. 

Otro jurado blanco

En otro caso de alta exposición por razones raciales en Wisconisn, un jurado blanco fue descartado del juicio de Kyle Rittenhouse - acusado de matar a tiros a dos manifestantes durante las protestas nacionales del año pasado- por haber hecho un "chiste" sobre el hombre negro que fue atacado a tiros por parte de la policía.

El jurado, un hombre blanco jubilado, le hizo un chiste a un oficial de policía que informó al juez que supervisaba el juicio contra Rittenhouse, en el que se investigaba a un joven que tenía solo 17 años cuando mató a tiros a dos personas que protestaban por el tiroteo de la policía contra Jacob Blake, un hombre negro desarmado en la ciudad de Kenosha.

"Entendí algo así como, '¿Por qué la policía de Kenosha disparó siete veces a Jacob Blake?'", advirtió el fiscal Thomas Binger, citado por NPR. "Tengo entendido que el chiste concluye respondiendo 'Porque se quedaron sin balas'".