En la antesala de la final de la Copa Argentina ante Talleres de Córdoba, Boca Juniors igualó 1-1 ante el colista Arsenal, en Sarandí, por la vigésima cuarta fecha de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), y no pudo abrochar su clasificación a la próxima edición de la Copa Libertadores.

Juan Ramírez abrió la cuenta sobre el final del primer tiempo para el conjunto dirigido por Sebastián Battaglia, empató en el complemento Bruno Sepúlveda.

El elenco de la Ribera prolongó un presente complicado por los problemas extrafutbolísticos y los malos desempeños, dado que viene de perder con Independiente y acumuló dos empates al hilo ante Newell's Old Boys y el de este sábado contra el limitado equipo del Viaducto.

Boca arrancó dominando el trámite, aunque le faltaba juego colectivo ante un conjunto local que le cedía pelota y terreno a la espera de sorprender con alguna contra. La primera llegada vino a través de la buena pegada del colombiano Cardona, que valiéndose de un tiro libre se la dejó servida a Izquierdoz, cuyo cabezazo salió apenas desviado.

El problema que se presentaba para el 4-4-2 que plantó Battaglia era que, como Cardona y Ramírez se retrasaban para armar juego y Villa desbordaba por las puntas para tirar centros imprecisos, Vázquez quedaba demasiado solo para definir rodeado de defensores rivales.

Y por si fuera poco, al visitante se lo veía lento, sin dinámica y poco decidido a jugarse en ofensiva, algo que convenía a un Arsenal sin ideas y que pretendía planchar el juego.

Entonces el peruano Advíncula tomó la lanza y en un arresto individual en el que dejó a tres rivales en el camino, cedió el balón para Cardona, pero el colombiano la mandó sobre el travesaño.

Del otro lado, el equipo de Darío Espínola se mostraba tibio, defendía bien agrupado y dejaba librado a su suerte a Albertengo, el delantero que aguantaba la pelota y se las ingeniaba para generar faltas cerca del área boquense y hasta algún que otro tiro de esquina.

Boca tuvo otra de riesgo luego de una soberbia habilitación de Fabra para su compatriota Villa, pero el atacante colombiano -de pobre actuación- definió muy mal de zurda. Hasta que Cardona frotó la lámpara y abrió para la cabeza de Fabra, quien a su vez en medio de una adormecida defensa local cedió para Vázquez, éste la taqueó para Ramírez, que no perdonó y marcó su primer tanto con la azul y oro. Así, con un desarrollo poco atractivo, el Xeneize se iba al descanso en ventaja. 

En el complemento, Arsenal se animó más y enseguida un remate de Picco provocó el revolcón de Rossi, que salvó a su equipo en la primera llegada seria del anfitrión.

Poco después, Papa cedió muy bien para Albertengo -demasiado solo en medio del desorden de la última línea xeneize-, pero el 9 desaprovechó una gran chance. 

Boca caminaba por la cornisa y Sepúlveda se lo perdió al rematar suave a las manos de Rossi. Respondió Cardona con un tiro que salió pegado al segundo palo. Sin embargo, Arsenal lo empató con Sepúlveda, quien llegó solo por izquierda en una jugada que nació de un lateral por la derecha y con una defensa xeneize muy mal parada. 

En una ráfaga antes del final, Rossi le sacó el gol a Viveros, quien poco después se perdió otra chance tras un error garrafal de Izquierdoz.

Arsenal mereció ganar sólo por lo hecho en el complemento. El empate fue un castigo a la desidia xeneize, que tuvo un desempeño flojo en general y que con el 1-1 perdió la oportunidad de meterse en la Copa Libertadores 2022 de manera directa. 

Ahora, el convulsionado conjunto xeneize apuesta para ello a todo o nada este miércoles en la definición de la Copa Argentina ante la T del Cacique Medina.