El artista catalán Joan Manuel Serrat contó este domingo que la decisión de dejar los escenarios fue motivada “por un sentimiento más que por una razón” y que tras su gira de retirada El vicio de cantar 1965-2022, que comenzará el 27 de abril del año próximo en el Beacon Theatre de Nueva York, seguirá haciendo lo que "más le gusta" en la vida, “que es estar vivo”.

“Han sido dos años largos duros con grandes pérdidas y con mucho tiempo de reflexión, he pensado que todo es muy frágil y que está bien: antes que me retire una pandemia como me tenía retirado, antes que me retire el tiempo o que me retire la gente, me retiro yo; pero me retiro de subirme a los escenarios, no de vivir”, dijo en una emotiva entrevista que brindó desde Barcelona para Telefe.

El catalán de 77 años comenzará su gira de despedida el 27 de abril del año próximo en el Beacon Theatre de Nueva York y prevé finalizarla el 23 de diciembre en el Palau Sant Jordi de Barcelona. “Retirarme a los 79 años es una buena edad, es una buena elección”, opinó el autor de clásicos como "Sinceramente tuyo" y "Lucía", quien el 2 de diciembre pasado anunció que esta manera de retirarse de las presentaciones en vivo le permitiría decirle adiós a su público "en persona".

Según anticipó, hará su escala en Argentina con dos shows que tendrán lugar en el Movistar Arena del barrio porteño de Villa Crespo el 19 y 20 de noviembre del año próximo: si bien tenía pactada una única función, durante la entrevista de este domingo anunció que había decidido sumar una más debido a que las entradas para el 19 se agotaron rápidamente. 

"Quiero hacer un espectáculo durante el cual no se le caiga a la gente la sonrisa de los labios. Habrá 20, 30 canciones, y no sé cuáles van a ser. Iré acompañado de mi equipo de siempre. Técnicos, músicos, iluminadores, los mismos de siempre. ¡Hasta yo voy a ser el mismo! ¿Colegas? No lo sé. Se podrían hacer muchas cosas. Ya veremos”, detalló sobre el repertorio que desplegará en su despedida.

De la primera guitarra al homenaje de Mollo

Durante la entrevista, Serrat también habló del significado que tuvo para él la primera guitarra comprada con esfuerzo por su padre, a la que recordó como “un regalo maravilloso de un hombre que no sabía a dónde iba a conducirme todo eso”. 

Se refirió, además, al valor que tuvo para él componer música: “Haciendo canciones yo he podido explicarme, comunicarme con los demás, he podido desarrollar un oficio, que me ha permitido viajar y reconocer que la homogeneidad de la especie humana es muy grande, he aprendido que todos sangramos por las mismas heridas y la sangre es del mismo color”, explicó. “Soy incapaz de desarrollar en una canción algo autobiográfico, en mis canciones hay algo de realidad y mucho de fantasía, el autor inventa y hace florituras”, agregó.

La entrevista incluyó un video que envió el líder de Divididos, Ricardo Mollo,  con una  una poderosa versión de la canción “Conversando con la verdad y el tiempo”. 

A lo largo de su carrera, Serrat forjó un lazo cercano con Argentina, país que visitó por primera vez en 1969. “Me alojé en el hotel Alvear que estaba en ruinas y donde jugaba al fútbol en los pasillos. Fueron años de la huelga Sitrac-Siam, del Cordobazo, de una revolución en la universidad y en las fábricas donde la gente se sentía sino dueña, partícipe del futuro y aquello a un joven que venía de un país oscuro donde la dictadura lo tapaba todo y estaba todo prohibido, le generó un deslumbramiento”, reveló en una entrevista de 2019.