Como ya es su costumbre, a través de un video amateur subido a las redes sociales, el ex ministro de Transporte Florencio Randazzo se mostró de nuevo en la búsqueda de adhesiones a su postulación de en la provincia de Buenos Aires y elogiando la competencia que habilitan las PASO. “Tenemos que tener la decisión de jugar este partido con respeto, sin agresiones, sin ver un enemigo en el otro compañero”, señaló el ex ministro en la sede de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). 

“Coincidimos todos en que el Gobierno, en términos generales, está mal. La gente que tenía un trabajo informal no lo tiene. El que tenía un laburo tiene miedo de perderlo. Los niveles salariales se han deteriorado en relación a la inflación”, destacó Randazzo. “Lo que vinieron a arreglar, no lo arreglaron, lo agudizaron”, agregó y observó que en la Argentina “tuvimos cuarenta por ciento de inflación y, ahora, la inflación está mínimo en 25 por ciento cuando las paritarias están por debajo de eso”, a la vez que criticó el aumento de tarifas. 

Enfocado en aglutinar consensos detrás de su figura, después de más de un año de mantenerse en silencio, Randazzo salió al ruedo en medio de las internas y los intentos de la dirigencia justicialista de caminar hacia la unidad. Logró el apoyo de algunos gremios como ferroviarios y Smata, el salto del diputado cegetista del Frente Renovador Héctor Daer, además del algunos intendentes bonaerenses del Grupo Esmeralda y del Movimiento Evita. En la reunión en la sede de la UOM que se realizó el martes pero se difundió conocer ayer, estuvieron presentes dirigentes territoriales de la cuarta sección electoral, el ex presidente de la Cámara de Diputados Julián Domínguez, el diputado de Smata Oscar Romero y el ex intendente de Quilmes y actual secretario de Relaciones Internacionales del gremio metalúrgico, Francisco “Barba” Gutiérrez.

“Tenemos una oportunidad única. tenemos que tener la decisión de jugar este partido. Con respeto, sin agresiones, sin ver al enemigo en los compañeros”, afirmó Randazzo intentando bajar el tono de la disputa interna que su espacio político inició con el kirchnerismo fundamentalmente en la provincia de Buenos Aires y agregó que había que “discutir el presente y el futuro, frente a este gobierno que plantea otro ajuste si ganan. Si somos creíbles, tenemos un escenario absolutamente favorable”.