Desde Santa Fe

Omar Perotti ratificó ayer que la deuda histórica que cobrará la provincia –actualizada al 31 de mayo- es de 151.873 millones de pesos. El gobierno nacional la pagará en diez años en bonos y títulos públicos que se ajustarán por el CER, “lo que garantiza el valor real del capital”, explicó su ministro de Economía Walter Agosto. En los primeros dos años, en 2022 y 2023, “Santa Fe percibirá 50.000 millones de pesos, es decir que en el 20% del tiempo cobrará el 34% de la deuda” y en los dos siguientes (2024 y 2025) el reintegro llegará al 55%”. Más de la mitad de la acreencia. El gobernador explicó también la ventaja de haber esperado el fallo de la Corte Suprema de la Nación –que definió el mecanismo de ajuste por la tasa pasiva del Banco Central como en el caso San Luis- en diciembre de 2021 y rechazar un eventual un acuerdo sobre la base de la tasa activa del Banco Nación, que había propuesto el gobierno de Miguel Lifschiz. “Nuestro planteo era: la tasa de interés que se le reconoció a San Luis o el fallo. Y esperamos el fallo. La diferencia no es menor. Si hubiésemos aceptado la tasa que había pedido Santa Fe (en la gestión Lifschitz), hoy la actualización era muy inferior: 60.000 millones de pesos menos”, sorprendió Perotti. Esperar el fallo de la Corte le significó entonces a la provincia ganar 60.000 millones.

Perotti y Agosto explicaron ayer el acuerdo que el gobernador firmó el miércoles con el presidente Alberto Fernández, en la Casa Rosada. Un convenio de ejecución del juicio que la provincia ganó en noviembre de 2015. En la línea del tiempo, Perotti resaltó cuatro hechos:

*En 2005, el reclamo administrativo que hizo el gobernador Jorge Obeid ante el presidente Néstor Kirchner para que “cese la detracción de los aportes al Anses del 15%”. “Aunque nunca hubo una foto o un video de ese momento, es clave porque formalizó el reclamo” y garantizó la acreencia. “Es bueno recordar –siguió Perotti- porque si hay alguien que conoce esta historia es el ministro Walter Agosto”, que ocupaba el mismo cargo con Obeid, y “trabajó en el reclamo administrativo para que cese la detracción ilegítima” de recursos. Agotada la instancia administrativa, siguió la judicial.

*En 2007, la demanda a la Nación que planteó el gobernador Hermes Binner ante la Corte. “Lo acompañamos todas las fuerzas políticas”, dijo Perotti y mencionó a Obeid y al gobernador Carlos Reutemann. “Yo estuve allí como intendente de Rafaela”.

*En 2015, la sentencia de la Corte que le dio la razón a Santa Fe.

*En 2021, el segundo fallo de la Corte que definió el mecanismo de actualización de la deuda por la tasa pasiva del Banco Central, que es la misma que había dispuesto en el caso San Luis.

“¿Por qué no hubo un acuerdo antes?”, le preguntó un colega. Perotti repasó la línea de tiempo, recordó que “la actualización de la deuda” no comienza desde el día que Binner inició el juicio, sino antes, cuando Obeid “formalizó el reclamo administrativo”, en 2005. “Esa es la realidad”. “¿Se podría haber cobrado antes? San Luis cobró antes”, planteó.

El “compromiso de campaña era trabajar para el cobro de esta deuda, que asumió el presidente Alberto Fernández”, recordó el mandatario. “Las negociaciones siempre estuvieron abiertas, pero llegó la pandemia y el tema pasó a otro plano”.

Lo que estaba en debate era el mecanismo de actualización de la deuda. “¿Qué tasa de interés se aplicaba? “Cuando fracasó el acuerdo fiscal del gobernador Lifchitz con el gobierno de Macri, la provincia pidió actualizar la deuda utilizando la tasa activa del Banco de la Nación”. “Con esa tasa podríamos haber tenido un acuerdo antes porque la Nación planteaba lo mismo que había pedido Santa Fe” en la gestión Lifschitz. Pero esa tasa era inferior a la que había obtenido San Luis”, que era la tasa pasiva del Banco Central, que era superior”.

“Entonces –reveló Perotti-, nuestro planteo fue: que se aplique la misma tasa que en el caso San Luis o esperamos el fallo. Y esperamos el fallo. La diferencia de tasa no era un dato menor. El acuerdo hubiese sido más rápido, pero hoy la actualización de la deuda hubiera sido inferior en 60.000 millones de pesos”. Esperar el fallo le significó entonces a la provincia aumentar su acreencia en 60.000 millones”. “Nuestra defensa de los intereses de la provincia fue muy clara”.

Perotti sugirió que Santa Fe podría haber cobrado antes la deuda si hubiera hecho lo mismo que San Luis”. El gobernador Alberto Rodríguez Saa “lo resolvió antes porque no fue a un acuerdo (con Macri) dentro del Pacto Fiscal (como hizo Lifschitz) sino que recurrió directamente a la Corte. Cuando fracasó el Pacto”, Lifschitz hizo el reclamo ante la Corte, pero eso ocurrió recién en 2018.

*El monto de la deuda. Se definió en diciembre de 2021 cuando la Corte dijo que el “mecanismo de ajuste era la tasa pasiva del Banco Central. "Por primera vez, la acreencia de Santa Fe tenía un número firme, porque hasta ese entonces el sistema de actualización era controvertido”, expresó Agosto. Apenas salió la sentencia, la provincia estimó la deuda en 132.630 millones, actualizada al 30 de noviembre de 2021. El 31 de mayo de 2022, actualizó la liquidación con el mismo mecanismo de ajuste ya por 160.959 millones de pesos. “Ese es el punto de partida”, dijo el ministro..

*Otro bono de Lifschitz. Pero a ese monto de la planilla de mayo –precisó Agosto-, “hay que restar un bono que Santa Fe aceptó del gobierno nacional en el marco del Consenso Fiscal suscripto en el año 2017”, en la gestión de Lifschitrz. “La provincia percibió 9.085 millones de pesos. Así que a la deuda determinada (160.959 millones) debe restarse ese bono (de 9.085 millones) que recibió la provincia, ajustado con la misma tasa que se ajusta el monto total de la deuda”. El resultado de lo que la Nación le debe a Santa Fe es entonces lo que dijo Perotti: 151.873 millones de pesos.

*Santa Fe no vende. Agosto insistió que todos los “títulos y bonos del Tesoro nacional” que recibirá la provincia se actualizan por el CER, lo que asegura que el capital no se deprecie por efectos de la inflación”. “La sentencia de la Corte preserva el valor de la deuda en términos reales. Todos los instrumentos son transferibles y cuentan con mercado”. Aunque después aclaró: “La lógica de la provincia no es vender los bonos, sino cobrar el flujo de fondos”, al vencimiento del capital y los intereses. “Veo que hay muchos que están preocupados por la cotización” de los papeles. “No es la preocupación de la provincia porque no necesita salir a venderlos porque no tiene ninguna urgencia”, ironizó.

*El flujo de fondos. “En los primeros dos años (2022 y 2023), la provincia va a cobrar 50.000 millones de pesos, o sea, que en el 20% del tiempo va a cobrar el 34% de la deuda”, informó el ministro. “Si agregamos dos años (2024 y 2025), en el 40% del tiempo va a cobrar el 55% de la deuda. Y si agregamos seis años, va a cobrar el 73% de la deuda en el 60% del tiempo transcurrido. Se prioriza un fondo anticipado de fondos. Y ese es el flujo que no sólo va a percibir el gobierno provincial sino también los municipios y comunas. La deuda que se cobra es por impuestos nacionales que son coparticipables.

*El destino del dinero. “Hay afectaciones vigentes, incluso en la ley de presupuesto 2022. Todos estos recursos deben destinarse a gastos de capital, inversión real directa o equipamiento. O cancelar financiamiento de gastos de capital. Es un buen resguardo de estos recursos que son de todos los santafesinos. Este destino contribuirá a cerrar una brecha en infraestructura que es aún muy importante en Santa Fe”, señaló Agosto.

*¿Cuánto para los municipios? “En el caso de 91 municipios y comunas que han recibido anticipos a cuenta de esta deuda para realizar obras. Los municipios y comunas van a percibir en las mismas condiciones que la provincia los títulos y el flujo de fondos. Los montos a coparticipar serían 21.600 millones de pesos y a se le detrae los anticipos de coparticipación y en el caso de 91 se deducirá el anticipo para ejecución de obras. Y eso nos da un monto de 18.477 millones que será el flujo de fondos para municipios y comunas”, cerró el ministro.