Desde la provincia indicaron que actualmente cuentan con 400 tobilleras de arresto domiciliario que se priorizan para casos de mujeres con hijos que están en prisión domiciliaria. Actualmente, hay solo dos en funcionamiento, y las llevan colocadas mujeres presas en su casa. Para Majo Geréz, nuevamente se corre el eje. "Estas situaciones suelen ser por delitos menores a los que han tenido que recurrir. Se trata de prácticas no legales de subsistencia para sus hijos e hijas, que hablan del contexto social. El hecho de que las únicas tobilleras (de uso domiciliario) que existen hoy estén en funcionamiento para mujeres y que a su vez no se envíen las de prohibición de acercamiento, con la cantidad de medidas judiciales que se dictan a diario, da cuenta de que no se está poniendo el eje en la prioridad", planteó.