Carlos Brassesco, apoderado de la Unión del Personal Auxiliar de Casas Particulares (UPACP) y de la obra social del personal de casas particulares, dialogó con Federica Pais sobre la situación de las empleadas domésticas en medio de la crisis por la pandemia del coronavirus.
Brassesco explicó que, de las diferentes categorías del personal doméstico, sólo quienes trabajan en tareas de cuidado pueden hacerlo al estar incluidas como actividad esencial. "No nos tenemos que olvidar que las trabajadoras de servicios generales, salvo aquellas que tienen un trabajo de jornada completa, media jornada o cama adentro, el resto que trabaja por hora tiene que ir a tres o cuatro casas y es una posibilidad e contagio para ellas, su familia e incluso para las casas en las que tienen que ir a trabajar", indicó.
"Las que la están pasando muy mal son las que están en la informalidad, son las que más abusos sufren por parte de los empleadores", contó y señaló que el 70% de las denuncias que recibieron "estaba vinculado con problemas de relaciones laborales, amenazas, despidos, suspensiones y que no le querían pagar el sueldo". "Del total de trabajadores el 97,5% son mujeres, hay muchas madres solteras, separadas y que su único sostén de familias, es una situación muy preocupante porque tampoco tienen un ingreso de mayor volumen", subrayó.
Además, contó que desde el sindicato elaboraron protocolos tanto para los empleadores como para las empleadas para poder retomar la actividad del sector. "Queremos que se reestablezca la situación con la mayor cantidad de pautas posibles", expresó.
